José Apezarena

Qué precio ha pagado Pedro Sánchez por verse presidente del Gobierno

Oriol Junqueras y Marta Rovira.
Oriol Junqueras y Marta Rovira.

El desarrollo del congreso de Esquerra, con el acuerdo de continuar las negociaciones con el PSOE para la investidura, confirman que Pedro Sánchez ya es presidente del Gobierno. Se demorará lo que se tarde en articular el proceso, pero ya lo ha conseguido. Lo tiene en el bolsillo.

En vísperas de la asamblea republicana, se llegó a temer un cónclave fratricida, dividido en dos sectores irreconciliables, uno partidario de romper la mesa y la baraja, el otro de negociar. Pero nada de eso ha ocurrido. Con lo que se ha comprobado finalmente que Oriol Junqueras posee el control absoluto de su partido.

Así pues, los republicanos no han roto con Sánchez. No se han puesto farrucos, exigiendo públicamente libertades que no pueden concederse. Les basta con que la genuflexa Abogacía del Estado emita un dictamen que les complazca. En el peor de los casos, si ningún letrado quisiera firmarlo, lo hará en primera persona la abogada general, Consuelo Castro. Para eso está.

Se confirman las informaciones que habían circulado de que en realidad todo estaba pactado, firmado y sellado, entre Pedro Sánchez y sus interlocutores republicanos. Y que los sustos, las aparentes rupturas, las amenazas y exigencias, las declaraciones desafiantes que hemos sufrido estas semanas, han sido solamente decorado, fingimiento, teatro, para que no se pudiera afirmar que el candidato lo había entregado todo, que se había abajado sin condiciones.

Por eso, porque ya lo habían acordado en secreto, hasta dieron fechas, el 30 de diciembre, como día de la investidura. El calendario estaba pactado y firmado, aunque sin descartar algún pequeño retraso cosmético si hiciera falta.

Total, final de año, día de Reyes… ¿qué más da? Lo que cuenta es que hay investidura. Y que Pedro se sale con la suya.

Esquerra gana, porque se convierte en el vencedor del pulso político sobre la independencia de Cataluña. Son los que han resuelto el bloqueo.

ERC queda también como la única fuerza con interlocución con el Estado, frente a la inanidad e inutilidad de JxCAT, su rival regional, al que se medirá en unas elecciones autonómicas próximas, inevitables si se consolidara la inhabilitación de Quim Torra.

Y el principal ganador es Pedro Sánchez. Finalmente saldrá investido presidente, esta vez sí, presidente de verdad, con todas las de la ley y no de tapadillo, gracias al pacto de Gobierno con Podemos y a la abstención de Esquerra el día que se vote en el Congreso de los Diputados.

 

Pero queda una tremenda pregunta, que roe la cabeza y hasta los hígados. ¿Qué ha entregado Pedro Sánchez a Esquerra, en relación con Cataluña? Porque Oriol Junqueras y los suyos no se han apeado de la independencia, ni tampoco de la ruptura unilateral llegado el caso. ¿Entonces?

Sánchez afirmó que lo que acuerde con ERC estará “dentro de la ley”, y que se pondrá por escrito. No me preocupan los escritos. El papel, como suele decirse, lo aguanta todo. Lo que me inquietan son los pactos secretos y las promesas escondidas.

¿Les ha prometido un referéndum de autodeterminación? ¿Y qué más?

La verdad, me temo lo peor.

editor@elconfidencialdigital.com

Más en Twitter

Portada
Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato