José Apezarena

¡Y si eso lo que quiere el PSOE, qué!

Pedro Sánchez se muestra dispuesto a ser presidente del Gobierno con los apoyos, si hiciera falta, de partidos tan dispares e incómodos para los socialistas como Podemos, los nacionalistas catalanes (incluido Esquerra), los vascos del PNV, y hasta con EH Bildu si fuera necesario. Con todos, sin discriminar procedencias ni objetivos políticos de esos obligados aliados.

Una amalgama tan confusa provoca sorpresa y repulsa en amplias capas sociales, pero sobre todo rechazo entre buen número de dirigentes del partido, con nombres tan conocidos como Javier Solana, Felipe González, Rubalcaba... y otros muchos, que así lo han expresado públicamente. Sin olvidar, por supuesto, a la lideresa andaluza, Susana Díaz.

Para defenderse de una impugnación frontal, Pedro Sánchez ha decidido acogerse a las bases del partido, es decir, al respaldo de los afiliados. Da por seguro que la militancia es bastante más de izquierdas que lo que representan esos líderes cualificados, entre los que hay que incluir a la mayoría de los barones regionales.

Por lo visto, el secretario general ha tomado temperatura al ambiente que existe entre los militantes, y ha constatado que no sólo aceptan ese "Gobierno Frankenstein" o "Sanchezstein", sino que están calurosamente a favor.

No les preocupa, pues, la contradicción de aliarse con sus principales enemigos, como es el caso de Podemos, y tampoco coaligarse con los partidarios de romper España.

Y yo digo. Si eso es lo que realmente se piensa en el partido, si tales son las posiciones y los propósitos del (todavía) segundo partido del país, entonces las cosas están mucho peor de lo que parece. Estamos perdidos.

editor@elconfidencialdigital.com

En Twitter @JoseApezarena

 
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