Escupir a un policía, 30 euros
La historia resulta casi increíble. Se celebraban las fiestas del barrio madrileño del Pilar. Hacia las cuatro de la madrugada, una muchacha estaba siendo atracada por un grupo de sudamericanos y, para impedirlo, intervinieron dos policías municipales de paisano.
Cuando los dos agentes se identificaron, a continuación grupos de jóvenes les atacaron, de forma que tuvieron que intervenir miembros de la Policía Nacional que se encontraban cerca, y posteriormente hubo que llamar a agentes de la Unidad de Intervención.
Se montó una batalla campal por las calles del barrio, con un balance de 37 heridos (nueve de ellos, agentes) y 11 detenidos, además de destrozos abundantes en establecimientos, cajeros, escaparates y mobiliario urbano.
Alfredo Perdiguero, secretario general y portavoz del Sindicato Independiente de la Policía Española (SIPE), en el programa de Curri Valenzuela “La tertulia de Curri”, en 13 Televisión, denunció la impunidad con que actúan estos alborotadores callejeros.
Además, según Perdiguero, los protagonistas suelen ser los mismos: en torno a unos trescientos personajes violentos, que son detenidos una vez tras otra y que salen a la calle sin más, para volver a repetir fechorías.
Hasta hace poco, las agresiones a la policía tenían consideración de delito contra la autoridad, pero una modificación legal las ha dejado en simple falta, castigada con multa y nada más. Sin que exista el agravante de reincidencia múltiple, que es lo que practican esos provocadores.
Y como un ejemplo gráfico de la difícil situación que tiene que afrontar los agentes, explicó que escupir a un policía esta castigado con multa… de 30 euros. Y si el sujeto es reincidente, es decir, si lo hace más veces, 50 euros. Demasiado barato, me parece.
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