José Apezarena

¿Y por qué no expulsamos de España a diplomáticos rusos?

Reino Unido acaba de anunciar la expulsión de 23 diplomáticos rusos por el caso del ex espía envenenado en Inglaterra, y ha suspendido todos los contactos diplomático al más alto nivel con Rusia, incluyendo la anunciada visita del ministro de exteriores, Sergei Lavrov.

La primera ministra, Theresa May, ha afirmado que el envenenamiento representa "un uso ilegal de la fuerza por parte del Estado ruso contra el Reino Unido". Y anunció que su Gobierno incrementará el número de controles a ciudadanos rusos que lleguen al país.

Londres ha dado a esos 23 funcionarios, identificados como "oficiales de inteligencia no declarados", una semana para abandonar el país, en lo que constituye la mayor expulsión de diplomáticos desde la Guerra Fría. La Casa Real anunció que ninguno de sus miembros acudirá al Mundial de Fútbol de Rusia este verano. 

Gran Bretaña no se anda con bromas cuando se trata de cuestiones de seguridad interna, como vuelve a comprobarse ahora.

¿Se lo toma con igual determinación el Gobierno de España, a la vista de los actos de inamistad, cuando no de enemistad, que ha protagonizado últimamente la Rusia de Vladimir Putin? No estoy tan seguro.

Ha quedado demostrada fehacientemente la injerencia de hackers rusos en el proceso independentista de Cataluña, algo que los servicios de inteligencia españoles han calificado de ataque "descarado".

Por no hablar de los sucesivos incidentes con aviones militares rusos merodeando en el espacio aéreo español, como la intrusión de dos Tupolev 160 hasta Bilbao y la detección de un caza Su-35 que desafió la defensa aérea española tras ser detectado en Gijón y llegar por mar hasta Rota

Tal como se contó en las páginas de El Confidencial Digital, la división de inteligencia militar rusa está detrás de algunos de los más graves ciberataques que ha sufrido el Estado español en los últimos años, y más en concreto los ministerios de Defensa y Exteriores.

Tres equipos de especialistas vinculados al SVR, al GRU y al FSB han “comprometido” información sensible que afecta a las Fuerzas Armadas y a las relaciones internacionales, porque han podido robar datos sensibles de las redes informáticas de ambos ministerios, sus dos objetivos “preferidos”.

 

Por no hablar de la intensificación de actividades por parte de miembros de la embajada rusa en Madrid, algo que conoce bien el Gobierno.

A la vista de las injerencias rusas en este país ¿no hay motivos para tomar alguna medida diplomática, en relación, por ejemplo, con "oficiales de inteligencia no declarados", pero conocidos, que operan aquí?

España expulsó recientemente a los integrantes de la embajada de Corea del Norte en Madrid.

editor@elconfidencialdigital.com

En Twitter @JoseApezarena

Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato