José Apezarena

"Me c. en tu padre, seas quien seas"

La situación de crispación que vive este país, consecuencia de los apuros económicos, los recortes, el paro, los desahucios... no acaba de remediarse.

Es una realidad que inquieta sobre todo a los grandes partidos, a la vista de las citas electorales que les aguarda: temen un espectacular voto de castigo.

Las noticias de mejora de la situación económica, de crecimiento del PIB y de las exportaciones, de frenazo al desempleo, etc. aún no han calado entre la población.

Algunos políticos han sentido en sus propias carnes el rechazo de la ciudadanía, con ocasión de su asistencia a un acto público, su presencia en las calles... Hay ejemplos numerosos.

Lo que voy a relatar ahora lo sufrió un conocido político, que circulaba por Madrid en automóvil, un vehículo no especialmente caro ni lujoso, pero que era lo que suele llamarse "un coche grande".

Se encontraba parado en un semáforo, cuando otro vehículo, este mucho más modesto, se le emparejó. El conductor le miró y, sin más, le espetó: "Me c. en tu padre, seas quien seas". Cuando se puso verde el semáforo, desapareció sin más.

El político lo contó diciendo que muy posiblemente aquel español no le reconoció, no sabía quién era. Y que le lanzó ese improperio simplemente porque iba en un coche mejor, más grande; eso, por lo visto, era para él, si no un delito, al menos un insulto.

Lo dicho. La crispación que no cesa. Al menos por ahora.

editor@elconfidencialdigital.com

 

Twitter: @JoseApezarena


Portada
Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato