Tenéis que pensar en España
Si he escrito "tenéis que pensar en España", no me refiero, obviamente, al difícil compromiso que este lunes afrontará la Sección Nacional en el Europeo de Francia, donde se enfrentará a un rival tan complicado como Italia.
No hablo de fútbol en este caso, sino de un asunto un poco más relevante en mi opinión: de política. Y me estoy dirigiendo, en particular y directamente, a los políticos.
Cuando, este lunes, 27 de junio, comiencen los contactos, encuentros y negociaciones para formar un nuevo Gobierno, y así eludir el riesgo de una tercera convocatoria electoral, pienso que el interés principal que ha de presidir tan delicado proceso es el interés de España. O sea, lo que de verdad necesita este país.
Quiero pedir que, al menos por una vez, los protagonistas, es decir, líderes y formaciones políticas implicadas, aparquen sus directos intereses, sus objetivos partidistas, sus proyectos de futuro, para mirar principalmente, exclusivamente, a lo que precisa esta nación llamada España, a sus gentes, que tanto sufrimiento llevan acumulado en los últimos años.
Si se priorizara, por encima de miras particulares, la conveniencia general, no tengo ninguna duda en que encontrarán la solución y formarán el Gobierno que necesitamos, a pesar de los sacrificios que ello pueda exigir a unos y a otros.
Una condición para que tal proceso concluya con éxito, y a ser posible pronto, es que todos, singularmente los principales líderes, abandonen personalismos, enemistades, enquistamientos y rechazos que puedan bloquear el acuerdo. Incluyendo sus propios proyectos personales.
Y si alguien, incluso más de uno, tiene que apartarse para hacer posible ese acuerdo salvador, habría que pedirle que lo asumiera.
Todo esto, repito, pensando en el bien de España.
¿Tengo esperanza en que se cumplan estas demandas? La verdad, no mucha. Y lo lamento.
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