La tentación de marcharse de España
Marchar a buscarse la vida fuera de España es algo más que una tentación. Constituye un drama real para cientos de personas, que, faltos de trabajo, y de expectativas de conseguirlo, han optado (y hoy lo siguen haciendo muchos más) por buscarse la vida fuera de nuestras fronteras.
Pues esa misma idea ha sido considerada por unas cuantas de las más grandes empresas españolas, incluyendo algunas que ostentan condición de líderes mundiales en su sector. Como suena.
¿Por qué habrían de escaparse? Porque la condición de empresa ‘española’, es decir con su sede social en España, les está castigando duramente.
Una de las ‘soluciones’ que han considerado es trasladar la sede a Londres. Y lo han pensado en serio.
En fin, que la marca ‘España’ se ha convertido en una rémora para nuestras multinacionales, que sufren por ello un duro castigo de los mercados. Algo que podrían ahorrarse si no tuvieran la sede en Madrid. Si se radicaran en el Reino Unido, por ejemplo, no sufrirían tanto en su financiación exterior y en la bolsa.
Alguna de esas grandes empresas consideran que los mercados internacionales, que se supone son racionales, tienen con ellos un comportamiento “irracional e incongruente”, ya que, al menos en su caso, ni analizan por ratios económicos fundamentales, ni discriminan que España es ya sólo un tercio de su negocio global y que su generación de caja está en su mayor parte fuera de España.
La penalización por ser empresa de matriz española también lo tienen interiorizado las denostadas agencias de calificación, que se dedican a rebajarles los rating.
Por lo visto, la posibilidad de una fuga ha llegado a oídos del Gobierno, que se ha echado las manos a la cabeza ante un escenario semejante y ha lanzado a los interfectos el mensaje de la más rotunda negativa.
“Llevarse la sede a Londres daría muy mala imagen a España. La huida de una multinacional española generaría un mal precedente y podría arrastrar un efecto imitación”, ha sido el mensaje del Ejecutivo.
Hay que decir que, aunque lo han valorado, las grandes firmas no se van a marchar de España. Al contrario. Ahí está su apuesta por el proyecto de lanzar la marca España. Aparte de que irse no es tan sencillo.
Pero se lo han pensado.
