La cena de Alfredo Relaño y la credibilidad de Javier Matallanas

Creo que los periodistas no debemos ser noticia. Por eso no suelo abordar casos de la profesión en estos comentarios. Pero voy a hacer una excepción. Por alusiones.

El pasado martes, El Confidencial Digital publicó una información sobre una cena entre el director del As, Alfredo Relaño, su redactor jefe, Tomás Roncero, con el empresario Eugenio Martínez Bravo.

Antes de publicarla, hicimos lo que exige la práctica periodística más básica: hablar con el protagonista de la información. Llamamos a la secretaria de Alfredo Relaño y le comunicamos que teníamos una noticia para el día siguiente en la que salía el nombre del director del As. No queríamos publicarla sin hablar antes con él.

Nos devolvió la llamada y nos confirmó todos los datos que teníamos, menos uno: indicó que esa comida no se había producido para animar a Martínez Bravo a presentar una candidatura alternativa a Florentino Pérez a la presidencia del Real Madrid. Sólo quedaron con él –afirmó- para interesarse por sus intenciones.

Publicamos al día siguiente la noticia. En ella se indicaba –como también habíamos contado días atrás (esa vez sin nombres)- que hay profesionales del Grupo Prisa alentando a posibles candidatos para que se enfrenten a Florentino Pérez.

Pues bien. La reacción ha sido curiosa. Alfredo Relaño ha publicado un sorprendente blog, donde:

-- Admite la llamada del periodista de El Confidencial Digital.

-- Falsea varios detalles de la conversación. Por ejemplo, no se le “advirtió severamente” con publicar la noticia si no se ponía, sino que se le explicó que se estaba preparando y queríamos hablar con él antes de lanzarla. Simple y llanamente. Sin matonismos, ni amenazas.

-- Asegura que el periodista de ECD le dijo que manejaba una “fuente de mucha garantía que nunca me ha fallado”. Es otra invención. Jamás utilizó esa expresión. Se le dijo sencillamente que teníamos conocimiento de esa cena. Punto.

 

-- Afirma también que la noticia publicada por ECD dice que él “había buscado a Eugenio Martínez Bravo para exhortarle a que se presentara”. Eso no aparece en ningún lugar de nuestra información: es otra invención suya. No se le atribuye esa intención. En definitiva, se le hizo caso, contradiciendo a nuestras fuentes. Posteriormente se escribe que hay profesionales de Prisa trabajando en esa dirección y que así lo hicieron con otro empresario, Borja Martínez Laredo. Son cosas distintas.

-- Relaño entrecomilla por último un ejemplo futbolístico que habría utilizado con el periodista de ECD para explicarle la imposibilidad de que Martínez Bravo dispute la presidencia a Florentino Pérez. Falta a la verdad por cuarta vez. No es cierto. No utilizó ningún ejemplo. No tiene importancia, es cierto. Es anecdótico, pero es que simplemente no es verdad.

Hasta aquí, la intervención de Alfredo Relaño. Pero no quedó aquí la cosa. Horas después, el también periodista del diario As Javier Matallanas irrumpió en twitter poniendo en duda la credibilidad de El Confidencial Digital.

No me parece admisible. Y se trata de un tema serio, porque un medio de comunicación vive precisamente de eso, de su credibilidad. Así que nos esforzamos en cuidar mucho nuestra fama. No digo –atención- que no cometamos errores (que los cometemos), sino que trabajamos muy duro para alcanzar una solvencia acreditada, y si alguien la pone en duda debe demostrar por qué.

De lo narrado más arriba no se puede concluir que hemos sido frívolos o poco rigurosos. En cambio, Javier Matallanas sí se ha comportado así con su comentario, porque ni argumenta, ni explica. Eso es más grave.

Por cierto, que hablando de periodismo, de rigor y de Javier Matallanas me ha venido a la cabeza una historia sobre credibilidad y solvencia. Recuerdo que el 27 de diciembre del año 2009, el diario As publicó una noticia (firmada con su nombre) que decía: “El dueño del City ofrece un billón por el Real Madrid”.

La noticia ya no está en la hemeroteca del periódico porque se vieron obligados a retirarla pero se puede leer aquí completa. Sí se puede encontrar en As un perfil sobre el jeque en cuestión que también firmó Matallanas aquel día. Esto no lo han borrado.

Pues bien. Horas después de la distribución en kioscos del periódico que incluía aquella información, llegó al diario un burofax firmado por un representante legal del empresario árabe exigiendo una rectificación y la retirada inmediata de la noticia de la web. En caso contrario, habría demanda millonaria. La noticia desapareció.

Lo menciono hablando de una cena (que sí se produjo) y de credibilidad. Así se escribe la historia.

Más en twitter: @javierfumero

Portada
Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato