Y Rajoy se fumó un puro

La fotografía del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, fumándose un puro mientras paseaba por las calles de Nueva York ha provocado un terremoto en España. Una marejada curiosa y algo zafia, creo yo.

La instantánea la tomó el miércoles el fotógrafo Jonan Basterra en el corazón de la Gran Manzana, mientras la comitiva del presidente pasaba frente al Radio City Music Hall. El autor difundió las fotos colgándolas en su blog y haciendo gala de una fina ironía:

-- Estoy estos días en Nueva York, de vacaciones, y cuando estaba sentado en la Sexta Avenida, buscando información sobre los incidentes en Madrid alrededor del Congreso de los Diputados en mi móvil a través de Twitter y diarios digitales, pasó por delante de mí Mariano Rajoy, presidente de España, fumando un puro. Prefiero no decir nada más…

Entonces, se armó la pelotera.

La foto apareció publicada en portada del diario El País. El autor fue entrevistado en la Cadena SER (también del Grupo Prisa). Twitter entró en combustión el jueves, bajo las etiquetas de #Rajoy y #MarcaEspaña...

Algunos alzaron la voz utilizando argumentos como los siguientes: es un desacierto hacer ostentación pública de despreocupación tras las protestas de los últimos días en las calles de Madrid y pocas horas antes de conocerse las nuevas medidas de ajuste adoptadas por el Consejo de Ministros.

Otro ejemplo:

-- “Recuerda mucho a otra foto de un ex presidente sentado en la Casa Blanca fumándose un puro con Bush y las piernas sobre la mesa. Lamentable esta clase política española que solo va a EEUU a fumarse puros y a pasearse como si fueran dioses”.

Otros se centraron directamente en las descalificaciones o citaban a personajes históricos como Fidel Castro o María Antonieta (un internauta aludía a su famosa frase “si no tienen pan, que coman pasteles”).

 

Pero no había un posicionamiento unánime. También hubo quien dejó claro lo absurdo de la crítica, con comentarios del tipo: “Vaya demagogia. Si fuera rojo y malgastara pasta en la alianza de las civilizaciones y encima fumara hierba, sería la leche”.

Uno más:

-- “Puestos a ser demagogos me apunto. Ayer vi a un tipo fumar en la puerta de un hospital mientras operaban a su mujer. Y también he visto a alguno hacerlo en ratos libres mientras trabaja, ¡con lo que eso baja la productividad! Dirán algunos: “es que es un puro”. Ah, entonces es que el vicio de fumar tiene grados, los que fuman de liar pueden, los que fuman fortuna también, Malboro ya no tanto, pero puros!! qué desfachatez!”.

Yo, sinceramente, me apunto a este último grupo. Porque en este mismo blog, en la sección de Política, se pueden encontrar duras críticas a Mariano Rajoy. Por su parsimonia, por su deficiente política de comunicación, por su afición a ponerse de perfil... por tantas cosas.

Sin embargo, esta campañita que sostiene que fumarse un puro implica ser un despreocupado respecto a los asuntos de tu país me parece de aurora boreal. Lo digo como lo pienso.

Más en twitter: @javierfumero

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