El culebrón de los trajes
Se acabó. El Tribunal Supremo ha confirmado el veredicto del jurado que absolvió al ex presidente de la Generalitat Valenciana Francisco Camps y al ex secretario general del PP valenciano Ricardo Costa en la causa de los trajes del caso Gürtel.
Termina aquí el culebrón de los trajes. Con una sentencia que, por mayoría de cuatro a uno, acuerda desestimar el recurso que presentó el PSOE valenciano contra el fallo absolutorio, al entender que concurre mayoría suficiente en el jurado y que la decisión no fue arbitraria.
Carpetazo, por fin, a un asunto que –visto en perspectiva- podría hasta ser calificado como de simple anécdota chusca. En cualquier caso, nada comparable al caso Bárcenas, por ejemplo.
Sin embargo, este ‘affaire’ se ha llevado por delante a Francisco Camps. No hay que olvidarlo. Alguien que se situó en su día incluso como posible recambio de Mariano Rajoy al frente del Partido Popular. Eran otros tiempos.
Anécdota o no, el aviso a navegantes es bastante claro: es muy posible que todo se acabe sabiendo; cualquier regalo indecente es susceptible de salir a la luz; se estrecha el campo de la impunidad.
Ojalá que después de estos dolorosos escándalos más recientes que España está teniendo que afrontar, los gestores de la cosa pública aprendan la lección: el que la hace es muy probable que la acabe pagando.
No es mala enseñanza.
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