“Hacíamos un periódico y ahora hay que hacer dos”. La redacción de El Mundo no cree en el nuevo ‘El Mundo de la tarde’
Revolución en la redacción de El Mundo. El nuevo proyecto de crear un diario vespertino solo para tabletas no ha gustado a una amplia mayoría de los periodistas. No confían en su futuro y, además, se quejan de que tendrán que trabajar con una mayor presión.
El lanzamiento de ‘El Mundo de la tarde’ no ha sido recibido por igual en la redacción del principal periódico de Unidad Editorial. Mientras la mayoría de los directivos se muestran esperanzados e ilusionados con el nacimiento de este primer vespertino para tabletas de España, entre los periodistas de base cunde el pesimismo.
“Hacíamos un periódico y ahora tenemos que hacer dos”. Es el comentario que se escucha a algunos de los integrantes de la redacción de El Mundo. Algunos de ellos, entre los que se encuentran firmas veteranas, ya han expresado sus quejas por los nuevos métodos de trabajo.
Ahora, los periodistas no solo tienen que trabajar para la edición del día siguiente, sino que hay profesionales dedicados al vespertino, otros con funciones para el próximo número de El Mundo, otros para la web… En definitiva, lamentan, un producto más que hay que hacer con el mismo número de periodistas.
Pero sus quejas no solo se refieren a la carga de trabajo adicional que han tenido que asumir. Un buen número de profesionales de El Mundo, entre los que se incluyen grandes nombres del periódico, no creen en este nuevo producto informativo.
Algunos recuerdan ‘Diario de la tarde’, que no triunfó. Creen que se trata de una apuesta arriesgada y que Pedro J. y su equipo fracasarán.
Veteranos periodistas de El Mundo destacan una anécdota que representa que los redactores no tienen la misma opinión que los jefes:
-- En una reunión celebrada hace unos meses en la que estaba presente la plana mayor del periódico, Pedro J. Ramírez planteó cuál sería la hora de publicación de ‘El Mundo de la tarde’. Uno de los directivos propuso que fueran las seis de la tarde, para ofrecer en su edición el cierre de la Bolsa de Madrid.
-- Algunos de los allí presentes no podían salir de su asombro. Algún periodista de la redacción llegó a comentar: “Utilizan referencias anacrónicas en un mundo digital”. La conclusión es que la información bursátil ya no es importante en el siglo XXI para un periódico y, sin embargo, los directivos de El Mundo se empeñan en ponerla en valor.
