Javier Fumero

Montoro juguetea con los impuestos

No por habitual debe dejar de asombrarnos. Hablo de esa extraña impresión de que nuestros políticos no gobiernan atendiendo fundamentalmente al interés general sino a su propio provecho. Lo digo por la reforma fiscal que prepara Cristóbal Montoro.

El Gobierno ha comenzado a desvelar los principales puntos del programa de estabilidad para el periodo 2014-2017 que va a enviar a Bruselas: supondrá un ahorro para los ciudadanos y las empresas de 5.307 millones de euros y se vislumbra –por ejemplo- una rebaja del IRPF y del impuesto de Sociedades y una subida de los tributos medioambientales (vinculados a la energía e hidrocarburos) y Especiales (tabaco, alcohol...).

Montoro aludió abiertamente en público a las “bajadas de impuestos que estamos programando”. Lo hizo en la rueda de prensa que tuvo lugar en La Moncloa. No se corta un pelo.

El otro día, en la plaza de las Cortes de Madrid, el ministro de Hacienda fue abordado por unos ciudadanos de a pie, que le gritaron con mucho desparpajo:

-- “Montoro, a ver si nos bajas los impuestos que nos tienes fritos”.

El titular de Hacienda no es de los que se arredre fácilmente. Casi sin inmutarse, mientras seguía su camino hacia el Congreso de los Diputados acompañado por sus dos guardaespaldas, respondió también en voz alta:

-- “A eso voy ahora”.

Y yo pregunto: ¿Por qué no se bajan ya los impuestos? ¿Por qué tengo la impresión de que el Gobierno ha decidido retrasar una medida que supondría un importante alivio para las economías familiares con el fin de sacarle partido meses antes de las elecciones generales?

¿Por qué no descargar cuanto antes la vida de esos españoles que han sabido apretarse el cinturón cuando tocaba? ¿Por qué no nos dejamos de jueguecitos y nos bajan los impuestos mañana?

 

Más en twitter: @javierfumero

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