Datos confirmados tras las últimas detenciones

Radiografía del anarquismo en España: reclutamiento, financiación y estrategia

Hay células identificadas en toda España. Recurren ahora al trapicheo de drogas para lograr fondos. Aprovechan las redes sociales para captar radicales violentos

Manifestación de anarquistas en Madrid.
Manifestación de anarquistas en Madrid.

Los llamados Grupos Anarquistas Coordinados, máximos exponentes del movimiento anarquista en España, sufrieron un duro golpe este lunes: la desarticulación de sus principales centros en Madrid, Barcelona y Palencia, con la detención de 14 cabecillas de la organización. La Policía Nacional ha elaborado, tras analizar el material incautado, un perfil de los integrantes de estas bandas violentas.


Según ha sabido El Confidencial Digital, la Comisaría de Información llevaba semanas vigilando de cerca a los radicales. El trabajo de campo ha incluido la recopilación de datos sobre la organización, los métodos que emplean para financiar el movimiento anarquista y la estrategia para la captación de nuevos “activistas” a nivel nacional.

Ahora, la Policía Nacional ha podido ampliar la información que tenía acerca de esos grupos, gracias a los 20 registros realizados en Madrid, Barcelona, Granada y Palencia el pasado lunes. En ellos, los agentes han decomisado:

-- 10.000 euros en metálico.

-- Material incendiario y componentes para la fabricación de explosivos.

-- Droga en una de las sedes de los Grupos Anarquistas Coordinados en Madrid. De hecho, a uno de los allí detenidos también se le acusa de un delito de tráfico de estupefacientes.

Los responsables del operativo han realizado una radiografía de los grupos anarquistas españoles, a la que ha podido tener acceso ECD, que llega a las siguientes conclusiones:

Tienen células por toda España

Los Grupos Anarquistas Coordinados son la suma de “centros sociales” o células anarquistas, creadas por toda España bajo el paraguas de los líderes del movimiento, con residencia en Madrid. En función de la importancia y del tamaño de la ciudad, esas células tienen más o menos integrantes.

En Madrid, por ejemplo, el grupo desarticulado el lunes tenía, según la información de la que dispone la Policía, doce componentes. Nueve de ellos pudieron ser detenidos y ya están a disposición judicial. En Barcelona se sospecha que las células anarquistas creadas también tienen un tamaño similar al de la capital.

Sin embargo, explican las fuentes consultadas, en otras ciudades más pequeñas el número de integrantes por célula es de solo cuatro personas: “Cada uno de los miembros tiene una función determinada dentro del grupo; tampoco necesitan más capacidad para hacer daño”.

 

Una organización piramidal

Como cualquier banda armada, los grupos anarquistas españoles poseen una estructura piramidal bien definida, con unos “cabecillas” en el vértice que ejercen de líderes y responsables de la organización de actos violentos. El resto de miembros cuelgan hacia abajo y representan el “brazo ejecutor” de esas maniobras planificadas por sus superiores.

Las distintas células, no obstante, constituyen “un núcleo muy cerrado”, en el que nadie que no haya sido captado por ellos puede entrar a formar parte del grupo.

Esa circunstancia dificulta al máximo la infiltración policial en estos colectivos, cuya “organización informal se va profesionalizando de forma rápida”.

Así se financian

La Policía Nacional conoce, a día de hoy, tres fórmulas empleadas por estos grupos anarquistas para financiarse. Son las siguientes:

-- A través de merchandising. Venden, a través de Internet o en puestos callejeros, todo tipo de objetos con símbolos anarquistas: pins, chapas, camisetas, pósters...

-- Huchas en los centros sociales. En las “sedes” de estos grupos, a las que acuden ciudadanos de a pie “para informarse”, cercanos ideológicamente, sitúan una hucha para donativos. Esa estrategia, recuerdan desde la Policía, ya la empleaba la izquierda abertzale y el entorno de ETA en las herriko tabernas.

-- Trapicheo con droga. Es la vía de financiación menos habitual, pero la emplean algunos miembros de este movimiento anarquista, con “contactos a nivel intermedio”. No es tráfico a gran escala sino menudeo.

Empiezan a formar redes de captación

De los datos recabados por la Policía, uno ha alertado especialmente a los agentes de la Comisaría de Información: la creación reciente, por parte de estos grupos, de redes de captación por toda España.

Esas redes, explican las fuentes consultadas, trabajan sobre todo por Internet, aunque también “pisan la calle” buscando a jóvenes de ideología anarquista que estén dispuestos a pasar a la “acción armada”.

Esa infraestructura de comunicación también se enriquece con los “contactos” que tienen los llamados Grupos Anarquistas Coordinados en otras asociaciones europeas defensoras del anarquismo.

Justifican la violencia para lograr sus objetivos

Tal y como se contó en estas páginas, los anarquistas detenidos el lunes están vinculados a la instalación de explosivos en la catedral de La Almudena (febrero de 2013) y en la Basílica del Pilar de Zaragoza (octubre de 2013). También participaron en la colocación de este tipo de artefactos en varias oficinas bancarias.

El uso de la violencia por parte de estos grupos está “plenamente justificado” para la obtención de sus objetivos, como lo son “la desestabilización, el colapso y la destrucción del sistema”, tal y como ellos mismos recogen en un manifiesto difundido a través de Internet.

Según las fuentes consultadas, “existen indicios” que apuntan a que estos radicales planearon atacar a un coche patrulla de la policía, con un cóctel molotov, “dos o tres días antes” de la proclamación de Felipe VI, con la intención de “crear un estado de alarma” antes de dicha ceremonia.

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