Rubalcaba se pasó la tarde del viernes consultando a sus ‘mayores’ el “¡Váyase señor Rajoy!”
El domingo, tres días después de publicarse la información de El País con los supuestos papeles de Bárcenas, Alfredo Pérez Rubalcaba compareció ante los medios para pedir el cese de Mariano Rajoy. La respuesta, criticada en algunos sectores del partido por “demasiado lenta”, se cocinó sobre todo el viernes. El secretario general del PSOE, que ya había vuelto de su viaje a Canarias, reunió a la ejecutiva por la mañana para ver qué postura adoptar. Los dirigentes de confianza estuvieron de acuerdo en que lo mejor era “esperar a ver qué decía Rajoy el sábado”. Así lo aceptó Rubalcaba. Acabada la ejecutiva, se encerró en su despacho durante toda la tarde para decidir qué hacer. Cuentan desde Ferraz que “consultó con los históricos del partido, incluidos Felipe González y Zapatero, que le recomendaron pedir la dimisión de Mariano Rajoy”.
