¿Hay que acabar con los billetes de 500 euros?

Les llaman ‘Bin Laden’ porque nadie sabe dónde están. Los billetes de 500 euros son difíciles de ver a pesar de que representaron el año pasado el 67% del dinero en circulación en España. De esta forma alcanzó casi los 46.500 millones de euros. La proporción de estos billetes de elevado valor facial sobre el total aumentó en tres puntos con respecto al comienzo de la crisis en el 2007 (entonces era el 64%).

España tiene 45 millones de habitantes, y siendo equitativos, en el reparto cada español tendría que tener en su cartera, por lo menos, dos billetes de 500 euros. España atesora el 19% del total que existen en la Eurozona, un porcentaje que no concuerda con el peso del PIB español en Europa.

Los técnicos de Hacienda, agrupados en Gestha, atribuyen esta evolución al repunte de la economía sumergida propiciado por el agravamiento de la crisis. Y todo ello, añaden, es compatible con la caída del 8% en el número en términos absolutos del total de este tipo de billetes en circulación en el 2012, el mayor descenso de los últimos cinco años.

En todo caso, tras el retroceso propiciado por el pinchazo de la burbuja inmobiliaria y las investigaciones iniciadas por Hacienda en el 2007 a los movimientos con billetes de 500 euros, España sigue moviendo inusuales cantidades de billetes grandes, según Gestha. Por ejemplo, 16 de cada 100 euros en billetes de esta denominación en la eurozona se movieron el año pasado en España. En el 2007 eran uno de cada cuatro. El producto interior bruto (PIB) español apenas supone la décima parte del que conforman los 17 países de la zona del euro.

Pero, ¿hay que acabar con los billetes de 500 euros? El presidente del colectivo de Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha), Carlos Cruzado, considera la posible prohibición “como una buena medida”. Sostiene que esta idea se viene planteando ya desde hace tiempo, e incluso a nivel europeo, por la vinculación que hay entre los billetes de 500 con las actividades delictivas y el fraude.

Revela, de hecho, que en el 80% de las actividades detectadas con billetes de 500 había fraude fiscal. Cruzado advierte, sin embargo, que esta medida no va a tener mucha repercusión en materia de efectivo porque el de 500 es un billete que se usa muy poco.

También el analista de Bank of America, Athanasios Vamvakidis, sostiene que la eliminación de estos billetes impulsaría la economía de la zona euro y le ayudaría a escapar de la recesión.

Argumenta que si se suprimen estos billetes el euro sufriría una fuerte depreciación, ayudando a los países de la unión monetaria a mejorar sus exportaciones y recuperar el crecimiento. Además, Vamvakidis también cree que los beneficios del Banco Central Europeo y de Hacienda al hacer aflorar el dinero negro servirían para inyecciones de estímulo en la economía.

En caso del que el BCE decidiese retirar los billetes de 500 euros de la circulación sería necesario establecer un plazo en el que podrían ser depositados en entidades bancarias o cobrados en billetes más pequeños. No sucedería, por tanto, como cuando se cambió la peseta por el euro, ocasión en la que el margen temporal para realizar el cambio se prolongó a la medida de la necesidad de los usuarios.

Pero también hay expertos que alertan sobre los riesgos de esta medida. Puede ocurrir –advierten- que cantidades importantes de dinero negro que ahora mismo toman la forma de billetes de 500, no sean cambiadas por sus propietarios por billetes de euro más pequeños, sino por billetes grandes de alguna otra moneda, lo que ocasionaría una fuga de capitales.