Haz un crucero en invierno y aprovéchate de sus numerosas ventajas

La temporada estival y los meses de verano es cuando la mayor parte de la población disfruta de las vacaciones. Esto implica obligatoriamente considerar esa época del año como la temporada alta.

En lo que respecta al turismo de cruceros, la temporada alta de esta forma de turismo, especialmente en el Mediterráneo, ocupa desde los meses de junio a septiembre, elevándose este periodo de tiempo a los meses de abril y mayo o septiembre y octubre, cuando el clima se presta todavía muy agradable.

Si ya extendemos la ocasión para hacer un crucero a los meses de invierno o cercanos a esta estación, desde noviembre a marzo, el principal escollo que nos podemos encontrar es la dureza del clima, si bien esta es una situación que se puede salvar en caso de viajar al Caribe, pues durante estos meses esa zona del planeta ofrece buen tiempo y temperaturas agradables.

Sea cual sea el destino que se elija para hacer un crucero en invierno, es recomendable previamente acudir a plataformas como CrucerosMediterraneo, que actúa como comparador para encontrar las mejores ofertas de cruceros en temporada baja.

¿Por qué hacer un crucero en temporada baja?

El principal motivo para elegir un crucero en los meses de invierno es, sin lugar a duda, el precio reducido. No es temporada alta, al menos en zonas como el Mediterráneo o zonas más exóticas con clima tropical, véase el Caribe, que ofrece temperaturas agradables durante todo el año.

En caso de viajar por el Mediterráneo, esa reducción de precio se puede invertir en un camarote superior o en un régimen de alojamiento con más ventajas y beneficios, o bien para disponer de más dinero para gastar en las escalas.

Otra de las razones que hacen atractivos los cruceros en temporada baja es la presencia de menos turistas a bordo y en las escalas. Las personas que viajan durante esta temporada del año pueden disfrutar de los lugares que visitan estando menos masificados, sin tener que soportar largas colas. En el barco, cuando en temporada alta hay que esperar varios minutos para poder desayunar, no ocurre lo miso viajando con menos gente.

Un tercer aliciente que ofrecen las rutas de crucero en invierno es que tienen menos afluencia de niños. Los pequeños de la casa pueden viajar mejor en julio y agosto, lo que hace que las familias decidan escoger mejor estas fechas.

¿Cuáles son los destinos más apropiados para realizar un crucero en invierno?

Las rutas de crucero más apropiadas para viajar en invierno son similares a los que se visitan durante todo el año, aunque teniendo en cuenta que la climatología juega un papel muy relevante en esta temporada.

Hay rutas que solo se pueden hacer en los meses válidos, como los países nórdicos o los glaciares de Alaska. En invierno aparecen como destinos interesantes los Emiratos Árabes o India.

No obstante, los destinos más comunes son Centroamérica, Hawaii, Islas Canarias y el Caribe, incluso la parte oriental del Mediterráneo. Entre estos destinos aparece el Caribe como el más atractivo para muchos usuarios, que ven que el invierno es una oportunidad inmejorable para conocer esa zona del planeta sin necesidad de gastar tanto dinero.

El Mediterráneo Oriental es más agradable en invierno, climatológicamente hablando, y el estado de la mar es también menos picado, por norma general.

Otro punto interesante es el de los cruceros fluviales. En Europa operan gran número de compañías que siguen operando en invierno. Los cruceros fluviales ofrecen escalas más largas en las ciudades que visitan, por lo que puede ser una oportunidad ideal para conocer destinos culturales europeos de relevancia.

Un último aspecto interesante es que cuando es invierno en el hemisferio norte, en el hemisferio sur es el verano, por lo que es una nueva zona a descubrir por los cruceristas. Sudamérica, Sudáfrica, Australia, Nueva Zelanda e incluso la remota Antártida son destinos a considerar.

En cualquier caso, ya sea para viajar al Caribe o para hacerlo a otros destinos más alejados, como el Cono Sur en Sudamérica, Oceanía y Sudáfrica, el factor limitante es el tiempo de viaje. A la duración del crucero hay que sumar el tiempo de viaje, que es de varios días si sumamos la ida y la vuelta al destino.