Libertad de elección: no a la Ley Celaá

Isabel Celaá en el Congreso de los Diputados.
Isabel Celaá en el Congreso de los Diputados.

La libertad es uno de los pilares esenciales para el ser humano. ¿Es posible vivir plenamente sin libertad de elección, de decisión en cuestiones fundamentales para nuestra vida?

La respuesta parece fácil: no. La condición humana plantea la capacidad del libre albedrío, de poder elegir -aunque nos equivoquemos- entre diferentes opciones o caminos. Vivir es una experiencia maravillosa y no un mero acto carente de sentido, o excesivamente dirigido por fuerzas ajenas a nuestra voluntad.

En España, en estos momentos, se está produciendo un claro atentado hacia nuestra capacidad de libre decisión; desde unos planteamientos rígidos, asfixiantes y dogmáticos, sin diálogo real y efectivo, se pretende imponer un modelo educativo basados en unos principios ideológicos excluyentes, que desprecian a una amplia mayoría de ciudadanos. 

La educación es una clave fundamental para el bienestar y crecimiento personal; pretender acotarla y dirigirla con rasgos doctrinales y excluyentes no puede llevar a ningún puerto seguro. Y es lo que se pretende con la nueva Ley educativa propiciada por un gobierno con evidentes gestos autoritarios.

Debemos estar alerta y movilizarnos contra quienes pretenden quitarnos la capacidad de elección de centro educativo para nuestros hijos. La enseñanza concertada desarrolla un papel muy importante dentro del sistema educativo español. La libre elección de centro es un derecho que debe ser defendido.

No debemos permitir que nos engañe y manipule un gobierno -junto a sus socios independentistas y defensores de terroristas- que con un marcado rasgo controlador y excluyente (autoritario) trata de impedir el derecho a decidir, en libertad sobre una cuestión muy importante.

Hoy, asistimos a un ataque directo a la educación. Mañana, a otros pilares esenciales de nuestra convivencia y desarrollo personal. Despertemos de un sueño narcotizado por una izquierda totalitaria carente de argumentos.

Hay que afirmar NO, con rotundidad ante una afrenta directa a la libre capacidad de elección de centro educativo. Somos una gran Nación, con una fecunda historia común y una lengua que es la segunda más hablada en el planeta: el ESPAÑOL; que nos permite comprendernos y seguir avanzando en derechos y libertades.

Ha llegado el momento de afirmar que somos ciudadanos libres y responsables, frente a un  totalitarismo ideológico que pretende disgregar, enfrentar y romper una convivencia pacífica, centrada en la capacidad de un desarrollo personal, autónomo y consciente en la fortaleza individual y colectiva.

 

No a una ley claramente injusta, mezquina y excluyente. ¡NO A LA LEY CELAÁ! Sí al diálogo y a la libertad de elección. Sí al español, sí a ESPAÑA.

 

Federico de Sánchez

Periodista especializado en salud, crecimiento personal y espiritualidad. Filósofo y coach espiritual. Presidente de la Sociedad Española para la Difusión de la Espiritualidad.

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