Cómo llegó al despacho de Iceta la bandera roja

Bertín Osborne se lanzó a la precampaña electoral de Cataluña entrevistando para ‘Mi casa es la tuya’ a los candidatos de Ciutadans, Inés Arrimadas, y el PSC, Miquel Iceta. Contraviniendo el lema del programa, no se grabó ni en casa del presentador ni en la de los candidatos, sino en una vivienda alquilada al efecto.

Donde Iceta sí dejó pasar a las cámaras fue a su despacho de primer secretario del Partit dels Socialistas de Catalunya, donde por ejemplo el líder del PSC apareció hablando por teléfono con Núria Marín, alcaldesa de L’Hospitalet de Llobregat.

Entre pilas de documentos, libros, cuadros y carteles de campañas electorales se pudo ver una bandera de color rojo intenso y con tonos amarillos. No era ni la senyera cutribarrada de Cataluña ni la rojigualda de España.

El Chivato ha podido saber que la enseña que tiene Iceta en su despacho es la bandera oficial de un municipio de Tarragona, Constantí, con el que a priori no le une ningún lazo personal, ya que el líder de los socialistas catalanes nació en Barcelona.

Todo se remonta a la campaña electoral de las municipales de 2015. Miquel Iceta acudió para un acto de campaña a esta localidad de 6.500 habitantes, a diez kilómetros de Tarragona capital y no especialmente independentista (votó sólo un tercio del censo en el referéndum del 1-O).

El mitin coincidió con la Feria Multisectorial de Constantí, y por ese motivo se podía ver en un mástil de gran tamaño la bandera municipal: sobre fondo rojo, una corona de laurel de estilo romano de color amarillo, inscrita en una circunferencia imaginaria en el centro de la tela y de un diámetro de 5/9 de altura.

Según recuerdan ahora los socialistas de este municipio de Tarragona, a Miquel Iceta le llamó la atención esa bandera, que además tiene un cierto parecido con algunos símbolos históricos del socialismo y el comunismo.

Preguntó por su origen, le explicaron la historia de la bandera municipal e Iceta les comentó a sus compañeros de Constantí que le gustaba mucho la enseña y inquirió dónde podía comprarla. Los socialistas del municipio le respondieron sorprendidos que no se vendía, pero que si después de esas elecciones municipales conseguían la alcaldía, le mandarían una.

Dicho y hecho: el PSC ganó las elecciones, se hizo con el gobierno municipal y meses después algunos de sus dirigentes acudieron a una cena del partido en la que coincidieron con Iceta. Le regalaron la bandera e Iceta la instaló en su despacho, tal y como mostraron las cámaras de ‘Mi casa es la tuya’.

 


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