Susana Díaz se atrinchera: no ofrecerá su cabeza a Pedro Sánchez

No dimitirá ni para permitir una pacto PSOE-C’s apoyado por Podemos que frene a VOX. Su objetivo es colocar un socialista al frente del Parlamento para que la nombre candidata a la Junta

46160710691_4307245f1b_b
Susana Díaz analizó ayer ante los medios los resultados del 2-D.

Tal y como avanzó Confidencial Digital apenas horas después de conocerse los resultados en Andalucía, la dirección del PSOE empieza a enseñar la puerta de salida a Susana Díaz. José Luis Ábalos, preguntado por esta cuestión, ha afirmado que el partido “necesita regenerarse” en la región. La todavía presidenta de la Junta, sin embargo, descarta marcharse.

Según explican a este diario dirigentes del PSOE andaluz próximos a Susana Díaz, los movimientos y las presiones internas para forzar el cese de la lideresa ya han comenzado. Tanto desde Madrid como desde diferentes sectores del partido en la región, donde todavía ven posible mantener la Junta aunque sea ‘sacrificando’ a la actual presidenta.

La renuncia de Díaz, de hecho, “estaba ya cocinada en Ferraz” desde hace varios días, cuando las encuestas apuntaban a que la única opción del PSOE para mantener el gobierno era ofrecer, tanto a Podemos como a Ciudadanos, la cabeza de la lideresa para que ambas formaciones respaldaran al nuevo candidato del partido a la investidura.

Ahora, y después de asimilar que los resultados han sido mucho peores de los esperados, importantes cargos socialistas apuestan por intentar una coalición con Ciudadanos, respaldada con Podemos en la votación de investidura, para frenar a Vox. La contrapartida para ambas formaciones, eso sí, sería la renuncia de Susana Díaz.

Los defensores de este movimiento insisten en que Ciudadanos, al final, deberá decantarse entre el PSOE y una suma entre PP y VOX. Y, en esa balanza, “puede inclinarse por nosotros si Susana se va”. Todo ello porque, destacan, “Ciudadanos ha asegurado que Susana Díaz no gobernará la Junta, pero no ha sido tan explícito con el PSOE”.

Susana Díaz no piensa dimitir...

Pese a la ofensiva de Ferraz y los críticos del PSOE andaluz, la todavía presidenta de la Junta descarta, “absolutamente”, presentar su renuncia ante Pedro Sánchez. Es consciente del batacazo electoral, pero considera que se ha ganado el derecho a continuar al frente del PSOE andaluz y ser ella la que intente la investidura.

Además, insisten desde su equipo, Díaz no se fía ni un pelo de que Podemos, a pesar de las declaraciones de Iglesias y Teresa Rodríguez defendiendo la creación de un “cordón sanitario” contra Vox, respalde un gobierno formado por PSOE y Ciudadanos, incluso sin que ella fuese la candidata a la presidencia.

La dirigente autonómica, afirman sus colaboradores más cercanos, está segura de que la formación morada jamás aceptaría una coalición de su partido con C´s porque abriría las puertas a una alianza similar para las generales, y “Pablo Iglesias no quiere correr riesgos después de votar en contra de esa opción hace tres años”.

...y tiene un plan para resistir

Así las cosas, Susana Díaz va a poner en marcha, en los próximos días, una estrategia de “supervivencia política y de desgaste de las derechas”, tal y como lo definen desde su equipo. Pretende retener la Junta de Andalucía todo el tiempo posible, sin renunciar a intentar formar gobierno o a la repetición de las elecciones.

 

El primer paso de esa ofensiva será “pelear hasta el final” para lograr que el nuevo presidente del Parlamento de Andalucía sea del PSOE.

Con los resultados en la mano, afirman las fuentes consultadas, “lo lógico es que la Cámara esté presidida por la fuerza más votada, aunque la mayoría en la Mesa sea para PP, Ciudadanos y VOX”.

No obstante, advierten desde el PSOE andaluz, la única contrapartida que va a pedir VOX a Juanma Moreno y Juan Marín para apoyar un gobierno liderado por cualquiera de los dos es, precisamente, presidir el Parlamento. Una exigencia que supondrá la primera “duda razonable” para PP y Ciudadanos, que aún están perfilando la estrategia para acercarse a los de Abascal.

Susana Díaz quiere aprovechar ese debate en la derecha para lograr un puesto clave, ya que es el presidente del Parlamento el que designa, tras una ronda de consultas, el candidato a la investidura:

-- “Su prioridad es ser ella la que ponga en marcha el cronómetro para formar nuevo gobierno en Andalucía. Si logra presentarse a la investidura, habrá ganado una batalla importante incluso perdiendo la votación, ya que unas nuevas elecciones estarían más cerca”.

Sánchez tendrá que forzar un congreso

Con esta determinación de Susana Díaz, Pedro Sánchez y su equipo en Moncloa y Ferraz han visto confirmada la hipótesis que empezó a tomar forma en la madrugada del domingo al lunes: si quiere que la presidenta de la Junta se marche, deberá forzar un congreso regional para su sucesión.

La estrategia del presidente, al menos por el momento, es mantener el respaldo a Díaz de cara a la galería mientras ella trata de ser candidata a la investidura. No obstante, y tal y como ha señalado Ábalos este lunes, si no logra formar gobierno, comenzará la maquinaria para sacar a la lideresa de la dirección del PSOE andaluz.

Video del día

Salvador Illa admite que Koldo se presentó en el Ministerio "sin cita previa"
Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato