La Royal Navy envía un cazaminas a realizar “patrullas de soberanía” en Gibraltar
El HMS Brocklesby, que llegó ayer a Gibraltar, está realizando tareas de vigilancia en la zona del incidente con la Guardia Civil
El incidente de esta semana entre una lancha de la Guardia Civil y patrulleras de la policía de Gibraltar se ha saldado con una llamada a consulta del embajador español en Londres, Federico Trillo. Pero aún hay más: un cazaminas de la Royal Navy está realizando “patrullas de soberanía” en el lugar del incidente.
Los hechos ocurrieron el pasado martes 1 de abril, cuando un buque del Instituto Oceanográfico Español (IOE) que trabajaba en aguas del Estrecho fue rodeado por patrulleras de la policía gibraltareña, instándole a que abandonara la zona.
El capitán del barco español solicitó entonces apoyo al servicio marítimo de la Guardia Civil, presentándose una lancha de la Benemérita en la zona. Gibraltar y España se acusan mutuamente de realizar maniobras peligrosas.
El Foreign Office, el Ministerio de Asuntos Exteriores británico, decidió entonces llamar a consultas al embajador español en Londres, Federico Trillo. Las autoridades inglesas han calificado de "grave intrusión" el suceso.
Un cazaminas para proteger la soberanía
La convocatoria de Trillo no es la única respuesta de Reino Unido al incidente. Ayer, el cazaminas de la Royal Navy HMS Brocklesby fue enviado a Gibraltar con un objetivo: realizar “patrullas de soberanía”.
Esta misión supondrá desplegar el buque en la frontera de las aguas que Gibraltar considera propias y fronterizas con España.
De esta manera, Reino Unido refuerza su presencia militar en la zona, más allá de las visitas temporales de otros buques y submarinos. La última de ellas, la del submarino Astute, el más moderno de la Armada británica que lleva a bordo un equipo de operaciones especiales.
