Los militares españoles pasan frío en los cuarteles

Afectados, el Cuartel General del Ejército, la Academia Militar de Zaragoza, los cuarteles de Bétera y Bótoa o la base de Cuatro Vientos

Unidades del Ejército español en plena nevada invernal.
Unidades del Ejército español en plena nevada invernal.

Las políticas de ahorro impuestas por el gobierno a toda la estructura administrativa del Estado también afectan a los militares. Uno de ellos es la reducción de horas de calefacción, que está provocando críticas por las bajas temperaturas que se registran estos días en algunos cuarteles y unidades.

En los acuartelamientos y unidades del Ejército de Tierra se “pasa frío”. La situación también está afectando a la Armada y al Ejército del Aire.  Las quejas que los propios militares afectados han remitido a El Confidencial Digital aseguran que el recorte en gastos de calefacción ha dejado “heladas” oficinas y cuarteles.

Según los datos que dispone ECD, se trata de una situación bastante generalizada aunque existe constancia de que está ocurriendo en el Cuartel General del Ejército de Tierra (Madrid), en el Cuartel General Terrestre de Alta Disponibilidad (Bétera, Valencia), en la Academia Militar de Zaragoza o en la base General Menacho (Bótoa, Badajoz).

Tal y como advierten militares afectados por la medida, algunas de estas unidades “están ubicadas en edificios muy antiguos, con techos altos, espacios diáfanos y ventanas sin refuerzo. Con unas pocas horas de calefacción al día no se consigue estar a más de 13 o 14 grados” dicen.

Instrucción del JEME

La medida de ahorro del gasto común –agua, calefacción, electricidad…- en el Ejército se establece cada año mediante a una instrucción firmada desde el Cuartel General del Ejército de Tierra, por la que se reducen drásticamente las horas de calefacción e incluso el uso de agua caliente en ciertas instalaciones.

Según indican fuentes militares a El Confidencial Digital, esta instrucción se distribuyó entre las unidades por el Jefe del Estado Mayor del Ejército (JEME), Jaime Domínguez Buj. Este tipo de orden se emite, dicen, todos los años coincidiendo con la llegada de las estaciones frías.

Estas medidas se enmarcan dentro del Plan de Ahorro y Eficiencia Energética para el Ministerio de Defensa, que impulsó el anterior Ejecutivo en 2009 entre sus primeras medidas de ahorro en las Administraciones.

Este plan, según figura en la memoria elaborada por Defensa tras el primer año de aplicación, nació para asumir “la creciente importancia del problema del Cambio Climático”. El objetivo era reducir en un 20 por ciento el consumo energético de las instalaciones dependientes de Defensa, lo que supone un ahorro de 40 millones de euros.

En total hay 70 instalaciones –las de mayor consumo- adscritas a este Plan de Ahorro.

 

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