Florentino Pérez ha hecho llegar al PNV un mensaje de tranquilidad: si logra su ‘asalto’ a Iberdrola no trasladará la sede de la compañía de Bilbao a Madrid

La Torre Iberdrola es el edificio más alto de Bilbao. Mide 165 metros, tiene 41 plantas y está situado a pocos metros del mítico Guggenheim. Es la nueva sede de la entidad que preside Ignacio Sánchez Galán, cuyo primer accionista, Florentino Pérez, intenta, desde hace meses, ganar presencia en la compañía. El presidente de ACS ha realizado un acercamiento reciente al PNV para transmitir mensajes de tranquilidad.

Florentino Pérez ha empleado este mes de agosto en ‘hacer los deberes’. ACS ha cerrado dos operaciones de gran calado (la venta de su participación en la concesionaria de autopistas Abertis y la venta de su filial Dragados Servicios Portuarios y Logísticos) que le han permitido recaudar unos 3.000 millones de euros. Con este dinero pretende reducir su deuda (10.423 millones de euros) e invertir.

En este segundo capítulo, el objetivo tiene nombre y apellidos: Iberdrola. En los últimos dos meses, ACS ha comprado en bolsa hasta un 1% de la eléctrica, hasta situarse algo por encima del 12%. Su intención es alcanzar, sin prisas, el 20% y obtener un puesto en el consejo que hasta ahora se le ha negado. Para ello, ha impulsado otra operación, de marcado perfil diplomático, dirigida a tender puentes con uno de los actores más reticentes: el PNV.

Según ha confirmado El Confidencial Digital, Florentino Pérez ha puesto manos a la obra para desmontar uno de los principales escollos que está encontrando en esta maniobra. Los accionistas de Iberdrola y el PNV recelan del presidente de ACS y de sus intenciones. Entienden que su deseo es derrocar a Ignacio Sánchez Galán y vender la compañía al mejor postor especulando con ella. El caso de Endesa, con Acciona y los italianos de Enel como protagonistas, horroriza a los accionistas que recuerdan cómo, años atrás, la francesa EDF ya mostró un enorme interés por la eléctrica… y llegaron de la mano de ACS.

De ahí las reticencias que existen en el País Vasco a este asedio. Allí no quieren ni oír hablar del tema. Hay que recordar que el segundo mayor accionista de Iberdrola (tras ACS) es la BBK, que preside Mario Fernández. Pero no sólo. El 20% del capital de la empresa es vasco, la compañía representa un 2% del PIB de la región y da trabajo a 5.000 empleados en el País Vasco. Es una compañía estratégica en la región.

Por eso, uno de los argumentos utilizados por Sánchez Galán para frenar la ofensiva de ACS ha sido transmitir en Euskadi que la intención de Florentino Pérez es llevarse a Madrid la sede de Iberdrola, una vez consumado su ‘asalto’. Todo esto ha generado una enorme desconfianza hacia él.

Las fuentes consultadas por ECD advierten, sin embargo, que los esfuerzos de Florentino Pérez parecen estar dando ahora sus frutos. El PNV ha recibido un mensaje claro: la sede de Iberdrola no saldrá de Bilbao en caso de que ACS logre tomar el control de la eléctrica. Esa consigna ha llegado al aparato del partido, que ha tomado buena nota.

 

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