Los ‘hombres de negro’ enviados a Madrid investigan a todos los bancos. Sospechan que hay morosidad oculta y no han informado al Banco de España de los créditos impagados

Según ha sabido El Confidencial Digital de fuentes financieras conocedoras de los planes de Bruselas, los técnicos de la Troika (BCE, Comisión Europea y FMI) están visitando, en esta nueva estancia en España, las sedes de todos los bancos del país en Madrid, grandes y pequeños y no sólo los nacionalizados.

Hasta ahora, en ninguna de sus expediciones a la capital habían inspeccionado las cuentas de otras entidades que no fueran las que han recibido los 40.000 millones del rescate financiero, es decir, los bancos nacionalizados (Bankia, NovaGalicia, Catalunya Caixa y Banco de Valencia).

Si habían visitado ya el Palacio de La Moncloa y las sedes de los ministerios de Economía, de Hacienda y de Empleo, así como el Banco de España y la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

No informan de los créditos impagados

Las fuentes a las que ha tenido acceso ECD explican que Bruselas maneja tres evidencias: que el agujero bancario en España es mayor de lo reconocido, que no se han conseguido despejar todas las dudas sobre la solvencia de las antiguas cajas, y que la reforma financiera de Rajoy se ha quedado corta.

Los ‘hombres de negro’ sospechan, concretamente, que los bancos están ocultando morosidad. Es decir, que no informan al Banco de España de todos los créditos impagados. Incluso, han llegado a aconsejar al organismo que dirige Luis Linde que no se fíe de los datos que le pasan las entidades.

Las dudas sobre la solvencia de la banca española han provocado que desde hace unos días hayan surgido voces, sobre todo en Alemania, que sostienen que los 40.000 millones de euros utilizados por España para sanear la banca son insuficientes.

No van a tolerar más ‘bombas de relojería’

Según las fuentes consultadas, Bruselas ha enviado un contundente mensaje al Banco de España: la refinanciación ha sido una práctica generalizada para contener la mora y las provisiones, pero se trata de créditos con un enorme riesgo de impago y que tienen unos niveles de cobertura muy bajos.

Los técnicos de Bruselas lo tienen claro: no están dispuestos a más ‘bombas de relojería’ en el sector financiero español. No van a tolerar más sorpresas como las que se dieron el año pasado con la toxicidad oculta de los préstamos inmobiliarios.

15.000 millones más en provisiones

Un reciente informe de la Inspección del Banco de España ya detectó hace unas semanas que el sector financiero oculta parte de la morosidad real de sus clientes con créditos mediante el sistema de refinanciarlos una y otra vez. Y exigió a la banca, en consecuencia, provisiones adicionales de unos 10.000 millones.

Unas exigencias que se quedan cortas para Bruselas. No dudarán, como resultado de su visita a Madrid, en obligar a los bancos españoles a mayores provisiones para atacar la morosidad oculta, es decir, los créditos clasificados como subestándar y las refinanciaciones empresariales que en realidad ocultan créditos incobrables.

Fuentes financieras conocedoras de las conversaciones entre el Gobierno y la Troika cifran en 15.000 millones más los requerimientos que los ‘hombres de negro’ pedirán a España para cubrir el déficit de colchón del sistema.

80.000 millones en créditos refinanciados

Bruselas ha detectado que la fórmula empleada por los bancos para disimular su tasa oficial de mora es tardar en considerar como de dudoso cobro sus créditos refinanciados, aprovechando que la normativa del Banco de España solo exige actualizar las tasaciones en caso de riesgos dudosos.

Por ello, sospecha que los activos problemáticos, entre dudosos y subestándar, son de casi 80.000 millones de euros, en lugar de los 45.000 millones que hay contabilizados oficialmente.

Argumenta que el aumento de la morosidad es inevitable, dada la actual situación de crisis económica, debido a las dificultades de empresas y particulares para afrontar los vencimientos crediticios.