Pacto para que la huelga general acabe en un ‘empate’: el Gobierno no se ensañará con el fracaso de la movilización, UGT y CCOO no se irán con las manos vacías
El Gobierno y las centrales UGT y CCOO van a pactar cómo salvar los dos la cara tras la huelga general, según antiguos altos cargos del ministerio de Trabajo. Ni el Gobierno se va a ensañar con el fracaso de la huelga, cebándose con las muy bajas cifras de participación, ni los sindicatos se van a ir de vacío, ya que obtendrán alguna contrapartida tras la movilización.
Según estos ex altos cargos, consultados por El Confidencial Digital, las bases sindicales son a la vez la base electoral del Gobierno socialista, que afronta ahora unas elecciones autonómicas y municipales. “Ni unos ni otros tienen interés en que la sangre llegue al río. La huelga general va a quedar en la conocida guerra de cifras, que sirve para entretenimiento de los medios de comunicación, pero lo importante es lo que suceda después”, dicen estos medios.
El secretario general de CC.OO Toxo repite enigmáticamente estos días: “Esto no se queda en una huelga, nada será igual, habrá una posthuelga”.
No se refiere a que se pare o cambie la reforma laboral aprobada, porque el Gobierno no va a dar marcha atrás: tiene encima el ojo de los mercados internacionales vigilando las reformas. Zapatero ha ido a Estados Unidos para hablar con grandes inversores internacionales y convencerles de “se va a cumplir el proceso de reformas y el déficit en 2013 bajará al 3% del PIB”.
Estas fuentes apuntan que los sindicatos obtendrán compensaciones: por ejemplo la futura reforma de las pensiones, que estará más cerca de lo que están dispuestos a aceptar los sindicatos que de lo que quieren los empresarios.
Y afirman que “la huelga general es una comedia, una puesta en escena”, en la que los sindicatos se juegan su prestigio y capacidad de movilización. Ni Mendez ni Toxo han roto con Zapatero, ni han perdido la comunicación con él. “Es otra comedia para consumo interno y despistar a la opinión pública”.
