Las dudas sobre la ‘españolidad’ de Joan Rosell le pasan factura
Madrid y Valencia le retiraron apoyos a última hora y provocaron una elección reñida a la presidencia de la CEOE
La tibieza ante el desafío independentista catalán le ha pasado factura a Joan Rosell en su reelección como presidente de la CEOE. Algunos de los apoyos con los que contaba, sobre todo de Madrid y Valencia, le han dejado de lado en la votación definitiva.
Las patronales de Madrid y Cataluña son las que más votos aportaban este miércoles a las elecciones a la presidencia de la CEOE. En concreto, 45 cada una. A los 90 apoyos que suman las dos grandes organizaciones regionales, hay que sumar los diez de la patronal valenciana.
Tanto Arturo Fernández, de CEIM, como Joaquim Gay de Montella, de Foment del Treball, habían garantizado su apoyo a Joan Rosell. También lo había hecho Valencia.
Pero, según confirman a El Confidencial Digital fuentes empresariales conocedoras del proceso, algunos de estos votos, sobre todo de Madrid y Valencia, se han perdido por el camino. Hay que recordar que la votación es finalmente secreta. Es lo que ha provocado esta reelección por la mínima de Rosell. Una diferencia de apenas 30 votos con respecto a su rival Antonio Garamendi.
Tibieza frente al problema independentista catalán
Según las fuentes consultadas, algunos de estos apoyos que ha perdido el empresario catalán están estrechamente relacionados con su “tibieza a la hora de enfrentarse al independentismo en Cataluña”.
“Queremos un líder de los empresarios que hable alto y claro ante este grave desafío”, confiesa un directivo madrileño que ha cambiado su voto a última hora. Y reconoce que no es el único, a pesar de la postura oficial de apoyo a Rosell por parte de la patronal CEIM.
Casos similares, aseguran fuentes internas de CEOE, se han producido entre los directivos valencianos, quienes esperan también una mayor contundencia desde la cúpula empresarial española contra la independencia de Cataluña.
Dudas sobre si agotará los cuatro años de mandato
Fuentes empresariales próximas a Rosell explican que la victoria ajustada es la que le ha llevado a prometer que tratará de incorporar a todo el mundo en los cargos que ahora hay que elegir, el comité ejecutivo y hasta cuatro vicepresidentes. Será una tarea de la junta directiva que se reunirá el 14 de enero. Garamendi tiene una vicepresidencia asegurada como presidente de Cepyme.
Incluso, en el entorno del directivo catalán dudan que agote el mandato de cuatro años para el que ha sido reelegido al no haber obtenido un respaldo mayoritario. Es consciente de que se enfrenta a una CEOE muy dividida y a una gran oposición interna.
