Pese a la bajada de la gasolina y el veto ruso a la UE

El precio de frutas y verduras se dispara por desabastecimiento

Los temporales de frío en el Mediterráneo han retrasado la maduración de tomates, calabacines, berenjenas… su coste se ha multiplicado hasta por tres

Baja el precio de la gasolina, continúa el veto de Rusia a los productos agrícolas europeos… sin embargo, el precio de verduras, frutas de hortalizas continúa subiendo. En plena cuesta de enero, algunos productos han triplicado sus precios. La culpa, apuntan en el sector, son los temporales de frío que afectan a todo el área mediterránea.


El kilo de calabacín costaba de media en los mercados españoles 1,36 euros en el mes de noviembre. En enero, su precio subió hasta los 2,16. El coste de producción para el agricultor pasó de 0,31 euros a 1,30 por kilo. Algo parecido le ocurrió al pimiento verde (de 0,5 a 0,84 euros el kilo), o a la berenjena (de 1,52 a 1,93 euros). Las patatas, por ejemplo, han pasado a costar 15 veces más al consumidor de lo que cuesta producirlas.

Estos son algunos de los datos que vienen recogidos en el Índice de Precios en Origen y Destino de los alimentos (IPOD) del pasado mes de enero, en el que se recogen subidas generalizadas en casi todas las verduras, hortalizas y frutas presentes en tiendas y supermercados españoles.

Según ha sabido El Confidencial Digital de fuentes del sector de la distribución, el auge de estos precios contrasta con las previsiones a la baja que se habían realizado hace meses.

La bajada del precio del petróleo, con la consiguiente rebaja del coste de distribución, así como el veto de Rusia a productos agrícolas procedentes de la Unión Europea, hacían prever un fuerte desplome del coste final de verduras, frutas y hortalizas.

Sin embargo, la situación es completamente distinta. Y las fuentes del sector consultadas apuntan a un ‘culpable’: el frío. Según explican a ECD, las olas de frío que han afectado a la zona sur mediterránea de España –Granada, Almería, Murcia…- ha “ralentizado la maduración de ciertos productos y ha provocado una escasez no prevista” aseguran.

La oferta de pepinos, berenjenas, calabacines o tomates ha descendido considerablemente, generando una “subida de precios inesperada” explican las voces consultadas.

Los temporales de frío registrados en otras partes del área mediterránea, como son Turquía y Marruecos –otros grandes productores agrícolas que compiten con España-, también han provocado la disminución de oferta de frutas y verduras extranjeras, por lo que el mercado nacional “se ha quedado sin opciones para suplir la disminución de la producción que hemos registrado en España”.


 

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