Rincones de Barcelona que tal vez no conocías y cómo recorrerlos

La iglesia de Santa María del Mar se ha convertido, durante los últimos años, en el paradigma del espacio redescubierto en Barcelona. Y es que, a raíz del famoso libro de Idelfonso Falcones (La Catedral del Mar) son miles los turistas que cada semana se acercan para visitarla. Ahora bien, lo que tal vez el lector de aquel libro no sepa es que las vidrieras del edificio esconden un secreto bien guardado: en la parte inferior de una de ellas hay un escudo del Barça

Barcelona.
Rincones de Barcelona que tal vez no conocías y cómo recorrerlos

 

Al igual que esta, otras muchas curiosidades ocupan la Ciudad Condal, pero pasan a diario inadvertidas. A continuación, recuperamos varias de ellas y animamos al viajero a recorrerlas. Eso sí, antes de iniciar nuestro itinerario conviene contar con un vehículo que nos permita desplazarnos con comodidad y flexibilidad de horarios. En este sentido, una buena idea es el alquiler de motos en Barcelona. Así, arrendar una scooter nos ayudará a ahorrar dinero en carburante y, también, tiempos en circulación y aparcamiento.

Iniciamos, ahora sí, nuestro recorrido. Lo hacemos visitando unas antiguas baterías antiaéreas: las de Can Baró, en las proximidades del Parc de Guinardó. Esta estructura, que corona el Turó de la Rovira, estuvo activa durante la Guerra Civil. En la actualidad, más allá de su testimonio histórico, ofrece unas excelentes vistas.

Por otro lado, si conducimos ocho kilómetros hacia el sur, hasta la Plaza del Rey, tendremos ocasión de entrar en el Museo de Historia de la Ciudad de Barcelona (el MUHBA). Entre sus principales reclamos encontramos restos arqueológicos romanos, visigodos y medievales. Por si fuera poco, el edificio alberga la medieval capilla de Santa Ágata.

A tan solo 500 metros de la Plaza del Rey damos con las termas romanas de la calle Regomir, a las que los antiguos viajeros acudían para disfrutar unos minutos de relax, pero también para cerrar negocios o pasar revista a los principales asuntos de la actualidad política.

Abandonadas las termas, volvemos a arrancar nuestra scooter para llegar hasta la zona del puerto y, tras poco más de un kilómetro, girar hacia la zona del Pueblo Seco. Allí, en la calle Nou de la Rambla, hallamos el Refugio 307. Se trata de una galería subterránea usada por la población a finales de los años 30, con el objetivo de protegerse de los ataques aéreos.

Tras esta segunda ‘excursión bélica’ probablemente nos sentiremos algo agotados. Así, ha llegado el momento de conducir hasta un ambiente algo más tranquilo y, al ser posible, inmerso en la naturaleza. De este modo, si tomamos la circunvalación B-10 y luego la B-20 hasta la salida 4, podremos acceder al Parque del Laberinto de Horta. Hablamos del jardín más antiguo de la ciudad, con espacios de los siglos XVIII y XIX, entre los que destaca un espectacular laberinto de arbustos.

Para terminar, de vuelta al centro de la urbe, visitaremos otro parque: los Jardines de Laribal. Allí descubrimos la popular Font del Gat, que data de las primeras décadas del pasado siglo. Esta construcción marcaba el lugar de peregrinaje para muchos barceloneses que acudían allí a disfrutar de una jornada de picnic.



 


Video del día

Marta Rovira confirma que negocia con Sánchez
un referéndum de independencia para Cataluña
Portada
Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato