Las claves de la marcha de Ekaizer (El País) a Público: indignación en el Grupo Prisa, el ‘puente de plata’ de Javier Moreno y anuncio de más salidas

Según relatan quienes le conocen bien, Ernesto Ekaizer no es una persona de trato fácil pero era uno de los periodistas de investigación de confianza del Grupo Prisa. Un profesional que, en el pasado, ha controlado y manejado investigaciones muy delicadas e importantes para la compañía.

Además, ocupaba un papel de gran relevancia en Prisa. Por ejemplo: era uno de los habituales en las reuniones de los martes en Gran Vía donde se marca la línea editorial del grupo. Es decir, conoce bastantes intimidades de la sociedad, de sus estrategias políticas y empresariales pasadas, presentes y futuras.

Por todo ello, el movimiento se considera de gran trascendencia y ha caído como una bomba a nivel interno. Máxime cuando Ekaizer no se va con cualquiera. Se ha marchado con el ‘enemigo público’ número dos de Prisa (el número uno sigue siendo Pedro J. Ramírez): el empresario de Mediapro, Jaume Roures.

El máximo responsable de Público andaba preocupado desde hace tiempo, buscando un “cerebro periodístico” para su proyecto, alguien que dotara de peso a la cabecera. Juan Pedro Valentín, empeñado en tareas más ligadas con la gestión del medio (distribución, quioscos…), no cumplía esa misión. Se quería alguien más pegado al periódico.

Según los datos recogidos por ECD, a pesar de la conmoción que este movimiento ha supuesto para Prisa, el director de El País está encantado con la marcha. Se ha quitado a otro de los pesos pesados de la redacción bastante críticos con su trabajo y con los nuevos estilos y prácticas periodísticas por los que ha apostado el rotativo de Miguel Yuste de un tiempo a esta parte.

De hecho, la conversación final entre Ekaizer y Moreno en el despacho de este último transcurrió de forma apacible, no se oyó una palabra más alta que otra, no hubo ni un mal gesto. Por eso, en la casa afirman que Javier Moreno ha puesto ‘puente de plata’ al periodista argentino.

Destacados directivos de Prisa confirman, además, que Ekaizer tenía diferencias importantes también con el consejero delegado, Juan Luis Cebrián. La fuerte personalidad de Ekaizer y su trayectoria en la empresa han provocado algún que otro roce incómodo en esas reuniones de gobierno, cuando éste ha rebatido sin rubor ideas de Cebrián.

Un último dato. En la redacción de El País se escucha decir que la salida de Ernesto Ekaizer podría actuar de detonante. “Ekaizer no va a ser el último en irse”, es la frase que se escucha en boca de mandos intermedios de la cabecera.