Juan Llopart, conocido como el “comisionista ‘killer’ al que no le tiembla el pulso”, desembarca en Zeta para afrontar la venta de activos y un duro ajuste de plantilla
Su nombre es Juan Llopart y el pasado viernes tomó posesión como presidente de la comisión ejecutiva del Grupo Zeta. Su nombramiento se presentó como un movimiento de La Caixa para poner orden en su participada. Sin embargo, la maniobra tiene otra lectura, muy relacionada con el perfil de este profesional.
Según los datos recogidos por El Confidencial Digital, ha sido el propio Antonio Asensio Mosbah el que ha dado el visto bueno al fichaje de Juan Llopart. Ha sido contratado por su experiencia en gestionar empresas en crisis y para dar forma a un ‘nuevo Grupo Zeta’, capaz de afrontar la difícil coyuntura económica actual.
La fallida venta del 80% de la compañía al industrial Alfonso Gallardo ha abocado al grupo a una profunda reestructuración que se va a llevar a cabo en dos frentes principales: la venta de activos y un duro ajuste de la plantilla, integrada por unos 2.500 trabajadores. En este terreno, confirman quienes lo conocen, Llopart se mueve como pez en el agua.
De hecho, este barcelonés de 58 años, posee una empresa dedicada específicamente a estos menesteres. Se llama Llopart Euroconsejo S.L. y trabaja en la asesoría de sociedades mercantiles. Siempre discreto, en la sombra, evitando la primera línea, Llopart se ha especializado en operaciones de saneamiento de compañías y en reajustes.
Ha actuado en numerosas ocasiones como comisionista, realizando tareas de intermediación para la compra y venta de activos. En esos procesos, suele llevarse una importante comisión por sus servicios.
De ahí el papel que Llopart está llamado a desempeñar ahora en Zeta. El nuevo ejecutivo de la compañía editora de El Periódico de Cataluña, Interviú, Tiempo, Sport, Cuore, Man y Ediciones B debe “poner orden” en su holding, integrado también por un larga lista de periódicos regionales y hasta postes de radio.
Por cierto, que Llopart es conocido en Cataluña por su mano de hierro, por ser un gestor con perfil de ‘killer’, al que no le tiembla el pulso llegada la hora de tomar decisiones drásticas y contundentes. De ahí que, en estos momentos, haya muchos que no las tengan todas consigo en Zeta, una empresa conocida por el elevado número de directivos y veteranos periodistas en nómina.
