Mensajes contradictorios sobre la posible alianza entre Globomedia y MediaPro, con un ojo puesto en las concesiones TV

La negociación entre las productoras Globomedia y MediaPro para una posible alianza se encuentra en estos momentos sumida en una cierta indeterminación. ECD ha podido escuchar de fuentes solventes voces que hablan de la entrada de las negociaciones en un peligroso punto muerto, mientras los protagonistas aseguran que se marcha a buen ritmo hacia un acuerdo final.

Desde la productora Globomedia nunca se ha querido hablar de una fusión con MediaPro. La factoría del Grupo Árbol trabaja desde hace meses en un posible acuerdo entre las dos empresas que comparten un mismo sector y que ya realizan acuerdos puntuales de colaboración.

Desde hace algunos años, Globomedia contrata a la sociedad de Jaume Roures el operativo técnico necesario para sacar adelante sus productos. Las negociaciones dieron comienzo, explican desde Globo, para intentar descubrir si se podía llegar a una alianza estratégica de mayor entidad. Por eso el primer paso ha sido encargar un estudio valorativo de ambas compañías. Tras tasar el valor real de cada productora se debía formalizar una propuesta.

Según se anuncia desde la productora MediaPro, las conversaciones irían en estos momentos muy bien encaminadas. La fase de la negociación estaría ahora centrada en el modo concreto de colaboración entre ambas sociedades.

Por contra, otras voces cercanas a Jaume Roures hablan en cambio de un cierto estancamiento. El presidente de MediaPro habría reconocido en privado la imposibilidad de su compañía de aceptar las cuotas de poder que pretendería establecer el consejero delegado de Globomedia, José Miguel Contreras, en la compañía resultante de la fusión.

Otros puntos de fricción que estaría entorpeciendo la buena marcha de las negociaciones estarían siendo la estimación del valor de la empresa resultante realizada por la factoría del Grupo Árbol –muy alejada de las pretensiones manifestadas por MediaPro-, así como las reticencias al acuerdo mostradas por el Grupo Vocento, propietario del 25% del accionariado de Globo.

Según estas mismas fuentes, estos desacuerdos habrían provocado un parón en las conversaciones que estarían estancadas desde primeros de mes, a pesar del interés mostrado desde distintos niveles políticos en esta alianza.

Algunos analistas destacan cómo detrás de esta alianza estaría la futura concesión de licencias de televisión en analógico. Tanto MediaPro, con muy buenas relaciones con el PSC de Pasqual Maragall, como Globomedia a través de Vocento, aspiran a una de ellas.

También continúan las especulaciones sobre posibles operaciones de MediaPro dirigidas a consolidar su empresa de servicios y abrirla a otras divisiones hasta conformar un holding completo. Se habla de un supuesto interés por la productora Cartel, de Eduardo Campoy, y una fusión con BocaBoca, que ha visto pasar a tres directores generales en los últimos tres años.

Desde MediaPro se niega que exista un interés por estas empresas. “Cualquier productora que esté en venta –explican-, nos la adjudican sin motivo”.