El Mundo invierte 65 millones de euros en un revolucionario plan industrial: 4 rotativas de última generación, diario a todo color

Para los responsables del proyecto se ha tratado de todo un desafío: replantear el sistema de producción del periódico a partir de la evolución que ha experimentado el sector de la prensa escrita. Según las informaciones recabadas por El Confidencial Digital, los impulsores de esta “revolución” han analizado el comportamiento en estos últimos diez años del diario El Mundo y su competencia.   La principal conclusión extraída de este ejercicio ha sido que, en muy poco tiempo, la oferta periodística en prensa ha pasado de ser un producto rígido, uniforme, de distribución masiva, con dos ediciones principales (una Nacional y otra específica para Madrid) y algún cuadernillo regional, a un soporte con una base informativa común y múltiples salidas, de rostros muy diferentes.   La revolución de los suplementos   Según los informes realizados, el sector no sólo ha asistido a una multiplicación de las ediciones regionales sino que estamos asistiendo a una demanda cada vez más creciente de cuadernillos de carácter temático, basados en múltiples criterios de segmentación. El caso del diario El Mundo es paradigmático: dispone actualmente de 25 ediciones regionales y unos 35 suplementos de muy diverso tipo.   Algunos ejemplos. El periódico de Unedisa imprime cinco días a la semana dos ediciones específicas: una es “Aula”, dirigida a estudiantes, y otra enfocada a la tercera edad. Además se lanzan suplementos para eventos del Recinto Ferial de Madrid, sobre regiones o ciudades, sobre vinos y gastronomía, sobre el mercado inmobiliario, especiales del mundo del Motor, rankings de escuelas o universidades, sobre viajes, tecnología… Se trata de soportes que prestan un servicio a expositores, ferias o promotores, y que funcionan muy bien publicitariamente.   Los analistas de El Mundo han concluido que este mercado va a seguir creciendo en el futuro, se seguirán descubriendo nuevos nichos de mercado –predicen- para estos productos donde la información aporta un valor añadido y sirven de soporte para los anuncios. La “revolución industrial” que prepara el periódico que dirige Pedro J. Ramírez va precisamente en esta dirección: transformar la actual estructura técnica en otra más dinámica que permita potenciar al máximo este negocio.   Los directivos de El Mundo han decidido pasar de un sistema de producción que apostaba por las grandes tiradas y una enorme fiabilidad y robustez del sistema, a una nueva configuración más flexible y que favorezca además la calidad: la crisis del papel prensa exige –explican desde la cabecera- mejorar la calidad del producto.   Una nueva planta de impresión   Para llevar a cabo este proceso, hace aproximadamente año y medio, El Mundo adquirió un inmenso solar, de 45.000 metros cuadrados, en la provincia de Madrid, cerca de su actual centro de impresión, en Torrejón de Ardoz.   Los nuevos terrenos están situados en Meco, una zona muy próxima a la salida de la R-2, una radial inaugurada recientemente que facilita las comunicaciones con el centro de la capital. En esa propiedad se ha edificado una nave de 31.000 metros cuadrados, con dos bancadas, que ya está concluida y donde se están instalando en estos momentos dos rotativas de última generación de la marca Mann. A estas se añadirán otras dos rotativas auxiliares que permitirán combinar la impresión de todo tipo de productos.   La nueva maquinaria le va a permitir a El Mundo optar por un nuevo diseño –que aún se está esbozando-, ir a todo color, y tirar al mismo tiempo varios cuadernillos pero que irán como un producto único junto al cuerpo central del periódico sin estar encartados. Serán lomos paralelos, perfectamente diferenciados y no dentro del periódico –encebollados-.   Según las fuentes consultadas por El Confidencial Digital, el nuevo centro de impresión estará plenamente operativo en unos siete u ocho meses. Paralelamente, también se está acometiendo la modernización de los centros de impresión regionales que utiliza el periódico.   El desembolso total de este plan supera los 65 millones de euros, sólo para el desarrollo del proyecto de Madrid.   Rediseño de todos los procesos   La nueva estructura va a obligar a modificar todos los procesos a futuro. Se elimina la pre-impresión en planta, se integra todo en una misma área de producción. La obra civil de la nave se adapta perfectamente al nuevo formato de trabajo elegido.   Fuentes conocedoras de este desarrollo aseguran que no ha existido fuente de inspiración externa alguna. Es un proceso totalmente innovador, fruto del trabajo de un equipo integrado por el departamento de Ingeniería de Unedisa –la empresa editora de El Mundo-, los profesionales de Mann, los responsables del sistema de Cierre, y un equipo de consultores externos contratados para la ocasión.