El despilfarro de los aeropuertos españoles: cada pasajero de Huesca cuesta 1.600 euros

Jerez, León, Burgos, Ciudad Real, Castellón… La geografía española está repleta de aeropuertos ‘fantasma’. Instalaciones inauguradas con escasos vuelos que ahora no son rentables y que se ven avocadas a cerrar. Solo unos pocos son rentables, como Madrid-Barajas, Barcelona-El Prat, Bilbao o Málaga. El resto, los que tienen un tráfico inferior a 100.000 pasajeros, se encuentran en números rojos. Destacan los casos de los aeropuertos de Burgos y de León, donde cada pasajero que aterriza o despega le cuesta 500 euros a AENA. El caso más sangrante se lo lleva el aeropuerto de Huesca: cada viajero supone 1.600 euros.