A Antonio Hernando no le abrieron la puerta en Ferraz
Verónica Pérez, la presidenta de la mesa del Comité Federal del PSOE, no pasó este jueves su mejor mañana en Ferraz. La guerra civil en el partido tuvo la culpa de que Pérez, del núcleo más crítico de Pedro Sánchez y mano derecha de Susana Díaz, pasara dos horas en la entrada del edificio a la espera de ser recibida por César Luena.
Pero no fue la única dirigente socialista que tuvo problemas para acceder a la sede nacional. Antonio Hernando, uno de los fieles del secretario general, también encontró sorprendentemente algún obstáculo.
Eran las 8:30 de la mañana. Tráfico denso en la calle Ferraz. Según pudo presenciar El Chivato, el portavoz parlamentario del PSOE llega a las inmediaciones y, de improviso, deja cruzado su coche en la calle, con el morro dirigido a la puerta del garaje de la sede socialista. Nadie abre la puerta. Los periodistas que hacían guardia se lanzan sobre el vehículo para tomar imágenes.
El revuelo que se origina cada vez es mayor. Pasan más de dos minutos y el vehículo sigue parado. El caos circulatorio en esta céntrica vía madrileña va en aumento. En plena hora punta. La hilera de vehículos va creciendo, el ruido de las bocinas de los coches saca a los vecinos a los balcones y la paciencia de los conductores comienza a agotarse.
“¿Quién está montando todo este lío?”, escuchó entonces El Chivato a uno de los automovilistas que interpelaba a los policías que se encontraban en la zona. Los agentes, en un principio, se encogieron de hombros. Pero segundos después explicaron lo que estaba pasando. El conductor continuaba quejándose de que no había podido avanzar ni un solo metro.
-- “Es Antonio Hernando”, le contestaron. La reacción del conductor tuvo su retranca: “¿Qué pasa, que este Hernando no tiene bastante con bloquear España, que también se cree que puede bloquear calles? En fin...”. -- “¡Qué razón tienes, manda narices!”, fue la respuesta del agente.
