“Ser ministra del Gobierno es un gran privilegio”. Una entrevista reciente a Trinidad Jiménez provoca irónicos comentarios en el Ministerio de Sanidad
En el departamento que dirige Trinidad Jiménez han circulado con profusión estos días algunas copias con las noticias que se han publicado esta semana en la prensa nacional aludiendo directamente al ‘futuro madrileño’ que parece esperarle a la ministra. Pero no sólo.
Los profesionales del Ministerio de Sanidad están comentado también la publicación, en una revista del sector, de una extensa entrevista a su jefa. La incluía Eidon, publicación trimestral editada por la Fundación de Ciencias de la Salud, que en su último número, correspondiente a los meses de marzo a junio, recogía esas declaraciones.
Según le cuentan a El Chivato, el texto ha provocado irónicas referencias a la vista de los datos filtrados desde el PSOE estos últimos días. Para empezar, la pieza lleva el siguiente entrecomillado, abriendo la conversación:
-- “Ser ministra del Gobierno de España es un gran privilegio, es un honor”.
Trinidad Jiménez se explaya relatando su satisfacción por haber podido acceder a esta cartera hace un año. “El Presidente me pidió que asumiera una responsabilidad con la que antes nunca había estado previamente vinculada –añade- pero la acepté pensando en rodearme de un buen equipo, en tomar las decisiones pensando siempre en el beneficio de los ciudadanos”.
En otro momento, se le pregunta sobre los objetivos que se plantea para su segundo año al frente del Ministerio. Esta fue su respuesta:
-- Los más inmediatos en sanidad son desarrollar los acuerdos en el Pacto de la Sanidad, la reforma de la Ley del tabaco, la presentación de la Ley de Salud Pública y la aprobación definitiva de la Ley de Seguridad Alimentaria y Nutrición.
Casi al final, se le pregunta abiertamente por su futuro, ante la próxima convocatoria de elecciones: “¿Se plantea otros retos, aparte del Ministerio de Sanidad?”.
Trinidad responde: “Cuando pienso lo que tengo que hacer nunca lo hago en términos de intereses personales. (…) Llevo poco más de un año y me siento muy bien haciendo este trabajo y no me planteo en ningún momento otra responsabilidad (…). Es el Presidente el que me nombró y es él quien tiene la prerrogativa de cesarme”.
Y concluyó:
-- “Los que tenemos un cargo público estamos sujetos a todo tipo de especulaciones. Es algo normal, sobre todo cuando hay unas elecciones por delante. Pero no hay nada de nada y estoy muy concentrada en mi trabajo”.
