Griñán considera otra traición de Chaves su último desmarque en el caso de los ERE falsos
La relación entre José Antonio Griñán y Manuel Chaves lleva meses siendo muy tensa, más aún desde que el presidente de la Junta apostara por Carme Chacón como secretaria general del PSOE, frente a la candidatura de Alfredo Pérez Rubalcaba.
Los desencuentros no han cesado. Chaves llegó a recomendar a Micaela Navarro como sucesora de Griñán si el PSOE no conservaba el Gobierno andaluz tras las elecciones del 25 de marzo.
Pues bien, según le cuentan a El Chivato, el último choque entre presidente y ex presidente de la Junta se produjo el martes, justo después de conocerse el auto de la jueza instructora del caso de los ERE falsos, Mercedes Alaya, que ordenaba el ingreso en prisión del ex consejero de Empleo Antonio Fernández.
El PSOE de Cádiz, cuyo secretario provincial es Manuel Chaves, difundió una nota, firmada por todos los dirigentes, en la que defendía la inocencia de Fernández y atribuía la condena a la “derecha reaccionaria”.
El texto indignó a José Antonio Griñán, quien había dado orden a Mar Moreno, consejera de presidencia, de comparecer públicamente para transmitir un mensaje de respeto a la decisión de la juez e insistir en el hecho de que ningún trabajador de la Junta en la actualidad está implicado en el caso de los ERE.
Desde la dirección regional del PSOE aseguran que el ataque de Cádiz a la resolución de la magistrada “es un desmarque inadmisible, que contradice el mensaje que se ha querido transmitir desde el Gobierno regional”. Una nueva ofensa, que “Griñán no va a olvidar”.
