Iñigo Urkullu no se esconde durante sus vacaciones en Fuerteventura
Durante este mes de agosto, los políticos aprovechan el parón estival en los parlamentos para tomarse unas vacaciones. La mayoría de ellos, además, intenta que nadie descubra dónde harán su veraneo, con el objetivo de pasar inadvertidos y “desconectar” mejor hasta la vuelta al trabajo en septiembre.
No es el caso de Íñigo Urkullu, que se reincorporará a su actividad al frente del Gobierno Vasco después de haber pasado unos días en Fuerteventura.
Según pudo comprobar El Chivato, el lehendakari no ha esquivado, en su estancia en la isla canaria, el contacto con el resto de turistas.
De hecho, ha optado por frecuentar zonas muy transitadas por los visitantes en el municipio de Jandía. El viernes de la pasada semana, 15 de agosto, Urkullu se dejó ver en la calle más céntrica de Morro Jable: una vía de unos 500 metros, con líneas de apartamentos y hoteles, y restaurantes de menú del día.
El lehendakari decidió tomar algo en uno de esos modestos mesones, a la vista de los allí presentes. Además, la presencia en una mesa contigua de cuatro hombres dio a entender, al resto de comensales, que el dirigente vasco iba acompañado de cuatro escoltas.
Personas muy cercanas a Urkullu confirman la estancia del lehendakari en Fuerteventura, y añaden que en el destino vacacional del presidente autonómico ha tenido mucho que ver la opinión de su mujer, que tenía muchas ganas de ir a esta isla canaria.
