El celo de Luis de Guindos para evitar acusaciones de “favoritismo” y el daño colateral a Banco Mare Nostrum

Lo que son las cosas. Luis de Guindos tuvo en su mano la posibilidad de que Banco Mare Nostrum pudiera seguir su aventura financiera en solitario, sin la necesidad de que caer en brazos de otra gran entidad. No ha sido así.

El ministro no ha ‘ayudado’ a la institución de la que fue consejero hasta que Mariano Rajoy lo llamó a dirigir la política económica del país. Todo por la escrupulosidad y las formas. Una paradoja.

Los directivos de Mare Nostrum esperaban que el ministro diera la batalla en Bruselas para conseguir una prórroga... hasta que el banco pudiera encontrar inversores privados que se hicieran con la mayoría del capital de la entidad.

Pues bien. Según ha escuchado El Chivato en la planta noble de Banco Mare Nostrum, De Guindos se quitó rápidamente de en medio. Es más, consideran que no hizo todo lo que estaba en su mano para evitar que la entidad tuviera que buscar una pareja de baile para salir adelante.

El ministro de Economía no estaba dispuesto a que, “con la que está cayendo”, se le pudiera reprochar haber “favorecido” a la entidad de la que había formado parte hasta llegar al Gobierno.

Ese celo explica que De Guindos mirara para otro lado y que Banco Mare Nostrum (BMN) haya tenido que acudir ahora al auxilio del Banco Popular, con quien ha iniciado conversaciones para una eventual fusión.

 

Video del día

Marta Rovira confirma que negocia con Sánchez
un referéndum de independencia para Cataluña
Portada
Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato