Oriol Junqueras se ahorró pasar por delante de la Guardia Civil
El pasado martes, Luis de Guindos y Oriol Junqueras mantuvieron una reunión reservada en la sala de autoridades del aeropuerto de Barcelona. En esa cita, el consejero de Economía de Cataluña pidió el ingreso urgente de 700 millones de euros, procedentes del Fondo de Liquidez Autonómica, para hacer frente a la situación de quiebra de la Generalitat.
El cónclave, que De Guindos aceptó por una llamada de urgencia realizada por Junqueras, ha servido al gobierno de Puigdemont para hacer campaña independentista. Además de asegurar que las dificultades de Cataluña son culpa del Estado, han insistido en señalar que la reunión fue “de igual a igual entre dos dirigentes soberanos”.
Una reacción que el líder del PP catalán, Xavier García Albiol, ya esperaba. Por ese motivo, publicó un comunicado en el que calificaba de “ grave error” la actuación de Luis de Guindos:
-- “Desde la buena fe, un ministro del Gobierno ha caído en la trampa de la Generalitat, ya que, mientras se dedican a despotricar sobre España y de lo mucho que el Estado les roba, cuando se apagan los focos corren a pedir reuniones secretas”.
Pues bien. Según le cuentan a El Chivato, esa reacción airada del ex alcalde de Badalona es compartida por sus compañeros de partido en la región, que no entienden cómo De Guindos dejó pasar la ocasión para dejar en evidencia al consejero de Economía de Cataluña.
Un dirigente del PP catalán, próximo a Albiol, ha explicado así en privado la cuestión:
-- “Tal y como está la cosa en Cataluña, un encuentro así nunca debió ser reservado. Se tiene que visualizar que la Generalitat nos está dejando en la ruina”.
De Guindos debía haber citado a Oriol Junqueras al día siguiente en el Ministerio o, si el consejero tenía tanta urgencia, en la Delegación del Gobierno de Cataluña.
De esa forma, apunta este dirigente, “Junqueras hubiera tenido que pasar por delante de la Guardia Civil” y “posar entre una nube de fotógrafos que hubieran inmortalizado su petición de urgencia al ministro”. Dos estampas que, gracias a De Guindos, se ha evitado el consejero catalán.
