Rosa Díez dedica parte de sus vacaciones en Santander a intentar tapar la sangría de UPyD en Cantabria
La líder de UPyD, Rosa Díez, ha aprovechado sus vacaciones estivales para viajar hasta Santander, donde ha disfrutado de la tranquilidad del norte durante una semana. Sin embargo, la diputada no se ha desplazado únicamente a la capital de Cantabria para evadirse del trabajo.
Según le cuentan a El Chivato, Rosa Díez estuvo paseando hace unos días por el Paseo Pereda, ubicado en el centro urbano de la ciudad, en compañía de su marido. Horas después, varios miembros del consejo de dirección de la formación también se desplazaron a Santander.
Rosa Díez no tenía programado ningún acto oficial en la provincia ni en sus inmediaciones. Sin embargo, según le cuentan a El Chivato, escogió esa ciudad como destino vacacional para “tantear el terreno” tras la alarmante fuga de militantes de UPyD en esa autonomía, y en general en el norte de España.
Concretamente, solo en Cantabria, han abandonado el partido un total de 38 afiliados de los 81 que tenía. Díez quería conocer de primera mano qué estaba pasando allí.
El único miembro que goza de la confianza de Díez y que no le acompañó a Cantabria fue Toni Cantó, diputado del partido.
Un mal detalle de la estancia de la líder de UPyD en Santander: fue reconocida por un periodista, que se le acercó en la calle a hablar con ella, pero Rosa Díez lo despidió con cajas destempladas. Según le cuentan a El Chivato, le espetó bruscamente que estaba de vacaciones y que no iba a hablar con él de nada.
