Soraya, los enfados de Rajoy y las filtraciones de García-Margallo
Bajan revueltas las aguas en el Gobierno desde que Soraya Sáenz de Santamaría y María Dolores de Cospedal se intercambiaran acusaciones por la debacle del PP en Andalucía. Los ataques de cada uno de sus equipos al bando contrario han subido de tono en las últimas semanas, tal y como se ha contado en estas páginas.
Pues bien. En mitad de esa guerra interna, se han producido dos acontecimientos que, a buen seguro, han sobresaltado a la vicepresidenta. A las visitas de Rajoy a Castilla-La Mancha para apoyar a María Dolores de Cospedal antes de la campaña por las autonómicas, se unió la publicación de una información que apuntaba que el presidente “lleva semanas” sin hablar con Soraya.
Según le cuentan a El Chivato, esa noticia, firmada por Javier Ayuso en El País, no ha gustado, en absoluto, ni a la número dos del Gobierno ni a su equipo. De hecho, los ‘sorayos’ van diciendo, cada vez que se les pregunta por esa mala relación entre Rajoy y la vicepresidenta, que ambos siguen manteniendo la buena sintonía de antes.
Es más. Algunos aseguran que ya la semana pasada, ambos demostraron, en un pequeño aparte en el Congreso de los Diputados, que “ni el presidente está enfadado con Soraya, ni ha dejado de hablar con ella, ni ha habido ningún enfrentamiento entre ellos”.
Por otra parte, señalan los ‘sorayos’, Mariano Rajoy jamás cortaría la interlocución con ningún miembro del Gobierno, por mucho que no le hubiese incomodado alguna actitud: “No es el estilo del presidente. No lo ha hecho con nadie, y menos lo haría con su número dos”.
Por todo ello, consideran la noticia como una filtración “falsa e interesada”. Sobre el muñidor de la operación, no tienen dudas:
-- “No ha salido de Cospedal, sino del Gobierno. Podría ser Ana Pastor porque lidera el frente anti-Soraya, pero lo más seguro es que haya sido Margallo, que además se lleva muy bien con Ayuso”.
Por último, los partidarios de la vicepresidenta no ven en los viajes de Rajoy a Castilla-La Mancha una maniobra del presidente en contra de Sáenz de Santamaría y a favor de Cospedal, sino un movimiento relacionado con la estrategia electoral:
-- “Necesitamos conservar la mayoría absoluta en esa región para que no aumente el debate en torno a Cospedal y eso debilite el partido. Por eso Rajoy se ha volcado en Castilla-La Mancha”.
