Las cárceles no son todas iguales... sobre todo si están en el País Vasco

Las fintas dialécticas que se ven obligados a realizar últimamente los dirigentes socialistas vascos empiezan a resultar estrambóticas.

No saben cómo poner más alfombras, para propiciar una bienvenida a batasunos, ex etarras y etarras. Y cómo justificar tales genuflexiones sin quedar demasiado en evidencia.

Todo sea por engrasar un presunto proceso de abandono de las armas. Abandono que aún no se ha producido, y que no es del todo seguro que vaya a llegar.

Hasta el propio Lehendakari, Patxi López, ha acabado siendo víctima de delirios ideológicos y verbales con esa intención. Como cuando lamentó públicamente la detención de dos etarras por orden del juez.

También Txiqui Benegas parece contagiado de ese virus. Acaba de declarar que “todas las cárceles son iguales”. ¿Por qué dice eso? Para justificar su afirmación de fondo: “Soy partidario del acercamiento de presos de ETA”. ¡Acabáramos!

Pero en sus propias palabras está la contradicción. ¡Señor Benegas, si todas las cárceles son iguales, qué más da que todos los etarras estén en la del Puerto de Santa María! O en Canarias, mejor.

Así que dejémoslos allí, ¿no? Total…