Zapatero e Ibarretxe: o tongo o diálogo de sordos. Y de propina, otro vídeo con la Z.

Una vez más si alguien esperaba que la tan cacareada reunión entre Rodríguez Zapatero y el Lehendakari, iba a aportar algo concreto, se habrá convencido de su enorme ingenuidad. Ni ‘le he escuchado, ni me ha escuchado’. Aquello de que el presidente del Gobierno iba a escuchar al político vasco, pero que Ibarretxe también le iba a escuchar a él, no pasaba de ser una frase. Al final cada uno sale diciendo lo que le conviene y aquí paz –Dios lo quiera- y después gloria –más bien poca-.

Y si somos mal pensados lo que parece es que todo es un tongo como esos de la lucha libre, y que ni uno ni otro se han rozado. Que las caras serias fueron para las fotos de la entrada y que, a lo peor, todo está atado y bien atado para después de las elecciones.

Si solo pensamos un poquito mal puede que no haya tongo; pero entonces, el presidente del Gobierno de España y el Lehendakari del País Vasco están más que sonados y no saben qué hacer ni qué decir para no quedar demasiado mal ante los espectadores de esta especie de farsa ridícula a la que nos invitan cada día.

Y si no pensábamos ni bien ni mal, si no todo lo contrario, llega el ministro de Justicia y pone la guinda anunciando desde el banco azul que no tiene la menor duda de que las condiciones políticas, para volver al diálogo con la ETA, se van a dar y como consecuencia…

Después, como si fuera un entrenador de alguna selección nacional no muy lejana, nos dice a los españoles que no nos fiemos de los titulares que escriben los periodistas, y a los periodistas nos amenaza con aplicar la asignatura de ética profesional de la que, según su opinión, estamos ayunos.

Pero no hay que tomárselo muy a pecho, porque ayunos y sin enterarnos estamos en demasiados asuntos. Tampoco nos enteramos de lo que fraguan los políticos, que hay que recurrir a los ‘traductores de los labios’ para que nos cuenten la bronca de la vicepresidenta de La Vega y la presidenta del Tribunal Constitucional. Pero, por suerte, hay tacos tan rotundos que los entendemos todos con solo ver la boquita que ponen los interlocutores.

Nadie debe de perder ni los nervios ni la serenidad. Ni siquiera Blanco parecía nervioso –y tenía motivos- cuando presentaba el vídeo del Partido Socialista, que no se sabe muy bien si está hecho ’motu proprio’ o es que les ha dado envidia del de Rajoy. El caso es que nos presenta a un Zapatero –con Z de Zapatero- más sereno que nunca, más sonriente que nunca y diciendo más vaciedades que nunca. Y todo, trufado de imitadores y de teleñecos, que ya uno no sabe a qué atenerse ni a quién votar de todos los sonrientes y serenos personajes que aparecen.

Y es que se nota la omisión -ya que Zapatero, con Z, esta ‘jocosillo’- en el video, de la broma sobre el ‘rato’ que se ha equivocado el Fondo Monetario Internacional en su diagnóstico sobre la economía española. Pero quizá Blanco -que ya se sabe que lo que no quiere es crispar- no lo ha insertado para mantener su habitual línea de política distendida, de amabilidad y de mano tendida al Partido Popular. Y es que el político gallego se está reblandeciendo.

Si estará contemporizador Blanco, que en el Partido Popular es como si añoraran sus controversias habituales, y Zapalana y Rajoy han decidido calmar el ‘mono’ de rifirrafes diciendo cada uno cosas distintas sobre las declaraciones de Rodríguez Zapatero y su forma de poner firmes a Ibarretxe. Lo que a Rajoy le pareció bien, a Zaplana le sonó a pasteleo. Pero no importa, lo que hay que hacer es mantener el tipo y la unidad del partido a toda costa, como hacen, por ejemplo, Esperanza Aguirre y Ruíz Gallardón, que ya nos ha dicho Alicia Moreno que el alcalde es un político culto y que eso no abunda entre los servidores de la cosa pública. Pues en eso lleva razón.

Que por cultura y saber estar que no falte. Y para ejemplo basta con el talante educado, cordial y cortés de Carod Rovira –me llamó Lluís, Josep Lluís- con los ciudadanos del programa de preguntas y respuestas de TVE. Hubo un momento que la forma de dirigirse a los que le preguntaba resultó hasta empalagosa, que más de uno pensamos que se iba a abalanzar sobre ellos para besarlos. Qué amabilidad la de este hombre.

Y es que cuando una persona quiere ser agradable lo tiene fácil. Y si no que se lo pregunten a Llamazares que, en el colmo de la amabilidad, calificó -en ese mismo programa- a Cuba de ‘revolución cercada’.

Más amable que ha estado Rodríguez Zapatero con Sanz, imposible. La ha prometido que seguirá presidiendo Navarra y, al escuchar la promesa, a Artur Mas le ha entrado una risa nerviosa tremenda. Claro que esa risa floja igual es por el follón del 20% que ahora tiene en CIU, que ya es casualidad y mala suerte que resurja el asunto de las comisiones en Cataluña, ahora que el bosque de Sherwood, en el que Robin Hood robaba a los ricos para dárselo a los pobres, dicen que va a desaparecer. ¡Qué cosas!.