La supuesta transparencia de Ana Botella

Ana Botella nos ha dicho que se va, que no será candidata por el Partido Popular en las próximas elecciones municipales. Dice que ha informado y que lo ha hecho con total transparencia. Pues no. Nos ha informado, con absoluta transparencia, del qué pero no del cómo. Sabemos que se va pero no sabemos por qué se va. Y esta vez, ni siquiera se ha esgrimido la excusa tan socorrida de los motivos personales.

A partir de ahí, era lo normal, se han desatado todo tipo de especulaciones. Especulaciones y cábalas que pueden quedar nubladas por la salida a la palestra de los posibles candidatos- candidatas más bien- que aspiran , al parecer, a que sobre ellas recaiga el dedo ‘nombrador’ de Mariano Rajoy.

Pero supuesto el dedo y supuesto que el presidente del Partido Popular apurará al máximo los tiempos y dejará, siempre lo hace, que se desaten todo tipo de rumores, hay que centrarse en los ‘por qué’ de la renuncia de Ana Botella. Y hay que hacerlo por la simple razón de que todo lo que pase puertas adentro de los partidos políticos -más si el partido está gobernando España y, en este caso, el Ayuntamiento de Madrid- es algo del mayor interés para los ciudadanos, que tienen derecho de enterarse qué es lo que se cuece entre quienes gobiernan.

No sabemos si Botella se ha ido dando un portazo. Si ese portazo ha sido en las narices de Rajoy. Si se ha ido harta de críticas y ninguneos entre su propio ambiente. Si se ha visto entre la espada y la pared del ‘no vas a ser la candidata’.  Si lo ha hecho por el bien del partido o para fastidiar a la cúpula que ha venido fastidiándola desde que sustituyó a Ruíz Gallardón. No sabemos, tan siquiera, si el tiempo del anuncio lo marcó la todavía alcaldesa o se lo marcaron desde Génova. No sabemos nada de nada.

Y tendríamos que estar enterados de si a Rajoy le han pillado con el paso cambiado; si lo tenía previsto y se le han adelantado, si la operación la ha pilotado el partido o si hay candidato, al menos, en alguna mente pensante.

El Partido Popular se juega mucho en Madrid como para que se anden con conjeturas y con rumores. Quienes tengan pensado votar a los populares –mucho más sus militantes- deberían saber más de lo que saben. La opinión pública también.

Y hasta el momento, no sabemos más que lo que nos ha dicho Ana Botella: que se va.