Tuenti al descubierto

Miles de padres se preguntan que hacen sus hijos durante más de tres horas diarias frente al ordenador. Están sorprendidos, sus hijas e hijos han dejado de ver sus programas de televisión preferidos y pasan de la TV en favor de Internet. Descubra cómo pasan los adolescentes un “clásico” día:

Son las 07:30 de la mañana, el despertador acude al encuentro de los más de 6 millones de adolescentes españoles, unos van al cole, otros al “insti” el resto a la “uni”. Un nuevo despertar y un nuevo día para asistir a clase. La primera idea, pereza, de hecho el grupo Mecano ya lo dijo, “hoy no me puedo levantar” pero ahí están los “viejos”, frescos como “lechugas”, dispuestos a recordarles que el día debe empezar a su hora.

Abren el ojo y ahí está: su Blackberry curve, su iPhone o su handheld, debidamente recargada, preparada para conocer los últimos “avatares” de los íntimos, me conecto con Tuenti, el acceso es rápido y sencillo: mientras voy al aseo me pongo al día, leo las “novedades de tus amigos”.

Toda la juventud se arrastra al aseo, los más a darse un lavado de “gato” los menos optan por una ducha. Mientras se cepillan los dientes, no pocos, empiezan a publicar los primeros pareceres sobre lo acontecido la noche anterior. Los servidores de Tuenti reciben la primera carga de contenido.

Es la hora del desayuno, café, Nesquick, Cola Cao, o nuestra bebida favorita, aderezada con bollería industrial en abundancia, alguno consume fruta fresca.

Los menos, un “buenos días” a los hermanos y resto de la familia, los más se centran en responder y en publicar sus primeros comentarios del día.

Se hace tarde, los más en transporte público, el resto en transporte privado, aprovechando estos minutos para ver la “ultimas fotos etiquetadas” y hacer algún “comentario”.

Las horas pasan sin pena ni gloria, clases, amigos, más clases y más amigos. Alguien comenta de viva voz alguna foto publicada en Tuenti, y los últimos amoríos de la clase, nada anormal. Las íntimas se retiran a publicar algún comentario “maledicente”, ellos a investigar la veracidad de una información “torticera” y a planificar con “Tuenti eventos” la próxima “party, fiesta, o borracherra”, llamemosle “x”

Vuelta a casa, las/los afortunados usuarios de Blackberry abren su canal de chat y comienzan a chatear gratis (son listos esta gente) han descubierto que con una tarifa plana de Internet en cualquier operador se les abre un canal gratis de comunicación con los amigos, sin pagar un duro, se acabó hablar a través del móvil y gastar “pasos”. El resto tiene que esperar a chatear con el canal Chat de Tuenti desde su ordenador

Momento de dejar el móvil y de pasarse al ordenador, que las fotos y los vídeos se ven y oyen mucho mejor.

Hora de merienda y estudio, es el momento perfecto de publicar lo chateado con el amigo o amiga. No es posible, mi mejor amiga/o me traiciona y ha estado con él o ella, hay pruebas, veo la foto en Tuenti y además ha cometido el “error” de utilizar “Tuenti Sitios” para identificar, inequívocamente, el lugar de la traición.

Entre lección y lección es momento de cargar un video de mi canción preferida para compartir con todos mis amigos/as, por cierto, aunque tengo cerca de 300, sólo manejo 60 o 70, es más que suficiente.

Vuelvo a actualizar mi estado con los últimos comentarios postreros del día, empieza a anochecer. Conecto al móvil al cargador, releo en el ordenador los comentarios del día y contesto a las últimas fotos etiquetadas, qué horror como están los amigos/as !!!!

Momento de cenar y de ver las últimas invitaciones a unirse páginas, son geniales alguna: “yo también quiero salir de fiesta con Pepe Reina”, “Católicos en Tuenti” o “yo también me quiero llevar al pulpo Paul a los exámenes tipo test”, me uno a todas.

Me llaman al fijo de casa, que es gratis, alguien no ha entendido mi último comentario y quiere “comentarlo” en vivo y en directo, ja!!!

Después de 45 minutos de charla, me voy a dormir, estoy agotado/a

Mañana más, gracias a Tuenti, claro!!!

Después de este relato, amigo lector dispone de todos los elementos necesarios para decidir cómo Tuenti impacta en la juventud española.