Gana Soraya, discretamente
Hay sintonía plena entre las dos. Por eso digo que la victoria de Angela Merkel el pasado domingo en Alemania es también una discreta victoria de Soraya Sáenz de Santamaría, la vicepresidenta del Gobierno español.
Se conocen y se respetan. Pero además, la líder alemana valora mucho algunas cualidades de la joven española. Hay quien dice incluso que es su “ojito derecho” de nuestro Ejecutivo.
Hace unos meses, una de las personas más cercanas a Mariano Rajoy nos describía, sorprendido, las alabanzas que la canciller dedica en privado a la vice. La califica de “persona muy lista y capaz”. Destaca la experiencia que ha acumulado respecto a los años que tiene (42 años).
A Rajoy le llegó a decir sin circunloquios: “Tiene usted una vicepresidenta muy capaz; es una chica muy lista”
Quizás por eso, Rajoy envió a Soraya el pasado mes de junio a Alemania, para que pasara dos jornadas en la capital alemana y vendiera la política de reformas del Ejecutivo, primero en un acto del partido de la canciller y después en la ZDF, una de las televisiones públicas germanas.
Se vieron, charlaron y se fortaleció el aprecio mutuo.
Nada de esto ha pasado inadvertido a la prensa alemana. A raíz de la última visita, el semanario Der Spiegel publicó un artículo titulado “¿El sucesor de Rajoy? La mujer más poderosa de la política española”.
Lo firmaba Helene Zuber y analizaba la crisis política que vive el PP a raíz del escándalo por la financiación ilegal del partido. Su tesis: Sáenz de Santamaría es la dirigente conservadora mejor posicionada para un posible relevo del presidente del Gobierno porque ha conseguido mantener "limpio" su nombre.
Der Spiegel asegura que esta "abogada bajita, a menudo con tacones, es ya la mujer más influyente de la política española”. Fue una niña “poco habitual”, que “estudiaba cada día, incluso en vacaciones” y que se licenció la primera de su clase.
Su buena memoria, su voluntad de trabajo “que lleva hasta la extenuación” y su tenacidad son otras cualidades alabadas por la redactora de la revista. Vamos, que no hacía siesta.
La mano derecha de Rajoy –concluía la revista- es “una de las pocas personas en el Partido Popular que, hasta la fecha, ha quedado libre de cargos en todas las acusaciones de corrupción”.
Por todo lo anterior digo que la victoria de Angela Merkel en Alemania es también una modesta y discretísima victoria de su amiga española, la admirada vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría. Porque como decía un viejo conocido: “todo comunica”.
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