El ilegal título de Derecho de Pablo Casado
La Universidad Complutense ha decidido cerrar la investigación abierta sobre el título de Derecho obtenido por Pablo Casado.
La universidad no ha detectado irregularidades sobre la forma en que el ahora presidente del Partido Popular logró, en 2007, esa licenciatura. Ha anunciado que archiva la información reservada que abrió en su día, y que no va a iniciar ningún expediente. O sea, que el título es legal.
Sobre esta decisión de la Complutense va a resultar difícil lanzar sospechas de favoritismo y de manejos políticos. Entre otras cosas porque, como es sabido, el rector, Carlos Andradas, no es precisamente un personaje de ideología de derechas.
Las sospechas sobre Pablo Casado se fundamentaron en la noticia de que, en las dos convocatorias de exámenes, junio y septiembre, aprobó doce asignaturas de la Carrera de Derecho.
En ese momento, no pocos rectores, decanos y catedráticos salieron a la palestra para proclamar, muy dignos ellos, que algo así resultaba prácticamente imposible en sus respectivas universidades y facultades. Con lo que abonaban la sospecha de que, en el caso de Pablo Casado, habían existido prácticas irregulares.
Hace bastante tiempo que abandoné las aulas universitarias como alumno, aunque ahora las sigo frecuentando como profesor, pero tan solemnes afirmaciones chocan frontalmente con la realidad de lo que puede ocurrir, y ocurre, en las aulas.
En no pocas universidades españolas, facultades y escuelas resulta posible sacar adelante ese número de materias en solo dos convocatorias. Que se lo pregunten, por poner un ejemplo, a tantos licenciados en Derecho.
Pero no solamente es factible en Derecho. También lo es en especialidades aparentemente más complicadas. Tengo un amigo que aprobó 22 asignaturas entre febrero, junio y septiembre. Y no fue en Derecho. Ni en una carrera de Letras.
Mi amigo sacó adelante la mitad de Cuarto y Quinto completo de Matemáticas por la UNED, y Cuarto de Telecomunicaciones, dos especialidades cursadas a la vez. Aunque he de reconocer que mi amigo es muy listo.
Yo no sé cómo logró Pablo Casado aprobar las asignaturas, pero eso de que no es posible sacar doce en dos convocatorias no responde a la realidad. Recordando el caso de mi amigo, pienso que los citados rectores, decanos y catedráticos tenían que habérselo pensado mejor, antes de decir que en España eso es un imposible.
editor@elconfidencialdigital.com
En Twitter @JoseApezarena
