De Canal 13 y otras campañas
Las paradojas sobre nuevas paradojas se agudizan con la mixtura de declaraciones episcopales en formato televisivo. La campaña contra Canal 13, empresa cuyo principal accionista son los obispos, ha llegado a un comunicado oficial de la autodenominada Conferencia Episcopal Tarraconense. No me creo lo de obispo contra obispo, por más que ponga música de Mecano.
En su reciente reunión señalaban, en un texto en el que se informaba de lo tratado en la Asamblea Plenaria de los obispos catalanes, que “los obispos que formamos la Conferencia Episcopal Tarraconense, atendiendo a las quejas que recibimos por parte de muchos fieles, lamentamos el clima de agresividad y la manipulación de contenidos que se están dando en algunos medios de comunicación del Estado Español, sobre todo en relación a la situación política y social de Cataluña”.
Y añadían, para que nadie se llevara a engaño: “Más en concreto, creemos que produce un grave escándalo en muchos miembros de la comunidad católica de nuestras Diócesis y también en nosotros mismos, el hecho de que el Canal de televisión 13 tv, que ha de respetar a las personas y a las instituciones según su ideario, en algunos informativos y tertulias, opte por el desprecio. La descalificación e incluso el insulto. Pedimos que este medio televisivo sea siempre un factor de comprensión y de diálogo responsable y fructífero”.
Sorprende el hecho de que los obispos en Cataluña se lamenten del tono de los contenidos de algunos medios –se supone que privados, y también públicos- en relación a la situación política y social de Cataluña, que no parece sea de su directa competencia. Si los contenidos de los citados medios atentarán contra la Iglesia, los cristianos, los dogmas y las verdades de fe, o contra el Papa y los obispos, se entendería con más claridad. Pero convertirse en salvaguardia de una situación política y social, entendemos que plural, resulta sospechoso de una asunción y derivación de responsabilidad nada matizada.
Y también es curioso el hecho de que, en la referencia a Canal 13tv, se diga que algunos de sus contenidos atentan contra su ideario, pero no se refieran a la causa que legitima y da naturaleza a ese ideario, su misión en cuanto medio que pertenece a la Iglesia. ¿Se repite la historia de la Cadena COPE? Si algo nos ha enseñado la radio de los obispos, es que uno de sus más preciados servicios ha sido el haberse convertido en paraguas de la libertad a través de los momentos más complejos de la historia reciente de España. Canal 13tv es la sombra en imágenes de esa libertad que parece no gustar a la intelectualidad cristiana catalana, tal y como han demostrado en un reciente manifiesto, previo a la declaración de los obispos.
Todo esto ocurre en un tiempo muerto en la Conferencia Episcopal, quizá bien aprovechado para esta jugada. Es llamativo el hecho de que España viva uno de los episodios más críticos respecto a su configuración y articulación como Estado y los obispos, colegialmente, se mantengan en un sorprendente silencio. Solo roto por el verso suelto de monseñor Martínez Camino, que ofrece sus últimos cantos de solista en entrevistas varias, alejado tácticamente de la mesa de portavoz de la Asamblea de los obispos. ¿Qué es lo que habrá causado esta afonía?
