A Marquardt, Glenn y Clark, autoras de un fascinante estudio –“Mi papá se llama donante”- sobre la vida de las personas concebidas mediante el recurso a un banco de esperma

Las especialistas en política familiar Marquardt, Glenn y Clark acaban de publicar un fascinante estudio sobre la vida de las personas concebidas mediante el recurso a un banco de esperma. Hoy, esta práctica es muy extendida, ante todo en EEUU: uno puede surfear online entre los datos de los donantes, como si estuviera en un buffet. La laxitud de la regulación es un fuerte contraste con las severísimas reglas y controles que hay siempre para la adopción. Con todo, el estudio de las tres especialistas aludidas revela por primera vez los muy ambiguos sentimientos que tienen buena parte de estas personas: agradecen su existencia a la industria de la fertilidad pero a la vez muestran su incomodidad existencial por ser “Niños mercancía” y por el modo en que fueron concebidos. Guinda a un trabajo que hace pensar. Consúltelo aquí.

 

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