A Joan Laporta, presidente del Barça, por alegar una campaña de acoso al club tras el lamentable incidente del salivazo de Messi
En el partido que enfrentó el pasado domingo al Fútbol Club Barcelona y al Málaga se vivió un incidente lamentable. Lionel Messi, jugador del equipo catalán, lanzó un salivazo al malagueño Duda tras un encontronazo durante un lance del juego. Las imágenes fueron emitidas por televisión, pero el árbitro estaba de espaldas y no pudo ver la actuación de Messi. Al no quedar reflejado en el acta arbitral, el jugador argentino no tendrá sanción. Joan Laporta fue preguntado por la actitud de desprecio de Messi. Lejos de censurarla, se limitó a decir que hay una especie de conspiración o trama oculta contra el F.C. Barcelona. El presidente del Barça debería ser mucho más juicioso, y más cuando existen pruebas irrefutables del salivazo de Messi. Es lamentable lo que sucedió y más el principal dirigente del club no tenga valor de censurar la mala educación como el del argentino. Guindilla a Laporta por su falta de valentía.
