Pasqual Maragall, que insinúa algo muy grave y descubre el pastel (o souflé) catalán: “nos haremos daño”
El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, ha abogado este martes por “dejar reposar el souflé catalán” creado por su insinuación de que CiU cobraba comisiones en las obras públicas, porque la situación generada, que define como un "accidente", ha dicho, "no es buena para nadie y nos haremos daño".
El presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, ha abogado este martes por “dejar reposar el souflé catalán” creado por su insinuación de que CiU cobraba comisiones en las obras públicas, porque la situación generada, que define como un "accidente", ha dicho, "no es buena para nadie y nos haremos daño". De hecho, apenas llegado a la capital de Uruguay para participar en los actos de toma de posesión del nuevo presidente de la República, Tabaré Vázquez, el dirigente catalán ha informado de que regresará este mismo miércoles a Barcelona, un día antes de lo previsto, porque "el ambiente en Cataluña está un poco enrarecido”. Y tanto. Pero es que el máximo responsable del Gobierno autonómico nos acaba de dar la clave de tanto nerviosismo. Ese “nos haremos daño” implica, aunque sea de manera velada, que son varios actores los que tienen que perder en esta polémica: no sólo CiU, como dijo en el Parlament, sino también el PSC. De ahí que ahora se quieran poner paños calientes, a un lado y a otro: parece ser que aquí hay alguien más implicado. Si no, ¿qué daño podría recibir el denunciante? ¿No será que también el acusador tiene alguna comisión que esconder en la alcaldía barcelonesa gobernada por el PSC? Guindilla al desenmascarado presidente.
